Un migrante marroquí muere en un albergue estatal en España
Un migrante de 26 años de edad y de origen marroquí, que había participado en una huelga de hambre hasta el pasado 11 de marzo, falleció durante la madrugada de este viernes en un albergue estatal de la Comunidad de Madrid, España.
La información fue confirmada por la Cruz Roja y los servicios de emergencias de la Comunidad de Madrid al medio local elDiario.es.
El hombre estaba permanecía en un centro de San Fernando de Henares, que forma parte del sistema de acogida estatal del Ministerio de Inclusión, Migraciones y Seguridad Social, que gestiona la Cruz Roja.
De acuerdo con ese medio, el joven se llamaba Karim y que había participado en una huelga de hambre junto a otros migrantes, en protesta por las dificultades para acceder a citas de asilo. Sin embargo, ante el inicio del Ramadán, los otros decidieron frenar la protesta, ya que estaban afectados por los días que pasaron sin comer.
El joven marroquí había llegado en patera a España y era uno de los migrantes que se declararon en huelga de hambre la semana pasada en protesta por la falta de acceso a las citas de asiloLa habían abandonado días antes, tras el inicio del Ramadánhttps://t.co/CLG2lu6WSS
— elDiario.es (@eldiarioes) March 15, 2024
Las autoridades desconocen las causas que provocaron la muerte de Karim, quien no tenía patologías previas, pero se presume que la huelga de hambre y los ayunos por Ramadán afectaron su aparato digestivo.
Un migrante de Senegal dijo al mismo medio que se encuentran "desesperados" por su situación de irregularidad y la poca ayuda que reciben en el albergue para encontrar citas que les permitan pedir la protección humanitaria de asilo, a pesar de tener casi tres meses en España.
"Hemos podido haber hecho 5.000 llamadas. Nadie contesta. Y el personal del centro sabe que nadie nos responderá y así estaremos mientras sigamos aquí", dijo Babukar, quien además advierte que el personal del albergue ya les avisó que deben buscar mudarse a otro centro.
La cartera de Interior asegura que ha realizado un esfuerzo para aumentar el personal de la Oficina de Asilo y Refugio. Sin embargo, la crisis migratoria ha sobrepasado exponencialmente el incremento de funcionarios, que aún parece insuficiente para atender la alta demanda de solicitudes de asilo en España, que pasó de 8.405 personas en 2017 a 163.000 en 2023.
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