La aprobación de una ley en Ecuador abre grietas en la oposición

La Asamblea Nacional de Ecuador aprobó el jueves la Ley para el Fortalecimiento de las Actividades Turísticas y Fomento del Empleo, enviada al Parlamento por el presidente del país, Daniel Noboa, a finales de febrero.

La normativa recibió 83 votos a favor, 13 más de los necesarios. El proyecto había sido remitido al Congreso en calidad de "económico urgente", lo que significaba que el Legislativo tenía 30 días para tratarlo, aprobarlo o negarlo. Si al vencer el plazo no había respuesta de los asambleístas, la ley entraría en vigor de inmediato como fue presentada inicialmente.

El presidente Noboa celebró la aprobación de la normativa. "Ecuatorianos, estoy muy contento porque hoy hemos cumplido con nuestra agenda legislativa de este período", dijo el mandatario en un video, que publicado en sus redes sociales.

De acuerdo con Noboa, la Ley de Turismo le va a dar "empleo a muchos jóvenes" y "va a reactivar la economía de zonas que hoy en día tanto necesitan esa activación".

"Ahora sí, me voy a farrear", agregó el mandatario en el video, que está acompañado de un fondo musical de reguetón, haciendo un guiño a la noticia que se conoció, también el jueves, de un presunto escándalo protagonizado por él en una vista a Madrid, cuestión que ha sido negada por el Gobierno ecuatoriano.

Con la aprobación de la reciente normativa, ya son cinco los proyectos de ley económicos urgentes que la Asamblea Nacional ha dado paso desde que Noboa asumió la presidencia en noviembre del año pasado.

Los cuatro anteriores fueron la reforma tributaria o Ley Orgánica de Eficiencia Económica y Generación de Empleo; la Ley Orgánica de Competitividad Energética, también conocida como 'Ley no más apagones'; la Ley Orgánica para Enfrentar el Conflicto Armado Interno, la Crisis Social y Económica (que incluyó el aumento del Impuesto al Valor Agregado); y la Ley para el Ahorro y la Monetización de Recursos Económicos para el Financiamiento de la Lucha contra la Corrupción.

Se caldean los ánimos

Entre los 83 votos afirmativos estuvieron siete de la bancada Ciudadana, que agrupa a los legisladores de la izquierdista Revolución Ciudadana (RC); situación que ha caldeado los ánimos al interno del movimiento.

"Hoy, siet asambleístas de la RC se apartaron de la decisión de la bancada y del movimiento de votar en contra de una ley que no soluciona nada, que contiene artículos de contrabando, y que da total discrecionalidad a Noboa para perdonar impuestos. Lamentable", escribió en su cuenta en X Andrés Arauz, excandidato presidencial y vicepresidencial por la Revolución Ciudadana.

Héctor Valladarez, parlamentario por esta agrupación, aseguró que el bloque había acordado votar en contra de la normativa, tras conocer que se introdujeron temas a última hora, que no habían sido sometidos a debate en la Comisión de Desarrollo Económico, donde se trató antes de ir al pleno.

"En temas sensibles se decide liberar el voto a conciencia, pero esta vez no fue así", comentó en entrevista con Radio Pichincha.

Por tanto, dijo que el Comité de Ética del movimiento deberá analizar, y posiblemente sancionar, el proceder de los legisladores que votaron a favor de la normativa: Henry Bósquez, Andrés Jurado, Pamela Aguirre, Johanna Ortiz, Marcela Holguín, Milton Aguas e Ingrid Salazar.

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Según Valladarez, sus compañeros de bancada justificaron que su decisión se debió a que les habían indicado que algunos temas que habían propuesto fueron incorporados al texto.

Sin embargo, Valladarez aclaró que esto no significa que habrá ruptura en la bancada. Recordó que este bloque legislativo cuenta con 51 asambleístas, lo que significa que así todos hubiesen votado en contra no hubiese alcanzado para rechazar la ley, ya que solo requería de 70 votos, de los 137 parlamentarios que integran la Asamblea Nacional, para ser aprobada.

Da la espalda

Sofía Reyes Espín, que forma parte de la bancada Ciudadana, votó en contra de la normativa, señalando que esa Ley de Turismo le da la espalda "a los actores del sector", "busca privatizar el sistema nacional de áreas protegidas" y "pone en grave riesgo a las Islas Galápagos".

También dijo que con esta ley se pretende "seguir perdonando impuestos a grandes negocios".

"No a una ley que de fortalecimiento del turismo tiene nada, que perjudica precisamente al sector turístico y que beneficia a los de siempre", expresó, por su parte, la asambleísta Ana Herrera.

A las voces contrarias a la normativa se sumó la legisladora Gissela Garzón, quien mencionó que se trata de "una ley de turismo que de turístico solo tiene el nombre".

"¡No! Porque no hay turismo sostenible y en crecimiento sin seguridad, sin vialidad, sin empleo, sin país", añadió en su publicación.

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