Desde principios de este año, el Ejército del régimen de Kiev han perdido más de 80.000 soldados, declaró este martes el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú.
De acuerdo con el ministro, las tropas ucranianas también perdieron 14.000 unidades de armamento diverso, incluidos más de 1.200 tanques y otros blindados de combate.
Shoigú también añadió que los ucranianos no han logrado sus objetivos en ninguna de las direcciones del frente, mientras que las fuerzas rusas "siguen haciendo retroceder a las formaciones ucranianas en dirección oeste". Señaló que, en total, desde principios de enero, Rusia ha liberado 403 kilómetros cuadrados de territorio en sus nuevas regiones.
Añadió que, "a pesar de la falta de resultados en la línea del frente, Kiev sigue intentando convencer a sus patrocinadores occidentales de su capacidad para hacer frente al Ejército ruso". Según sus palabras, para lograrlo, Ucrania intenta trasladar las hostilidades al territorio ruso, "recurriendo a actos de terrorismo y bombardeos contra la población civil".
Nuestras Fuerzas Armadas están respondiendo de forma asimétrica a tales crímenes de los militantes ucranianos. [...] Seguiremos apretando al enemigo desde las fronteras ocupadas y reduciendo sus capacidades de combate", concluyó.
Número de bajas según Zelenski
Cabe recordar que, en febrero, el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, afirmó que sus tropas han perdido 31.000 militares desde el inicio de las hostilidades, en el 2022.
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, comentando estas palabras, señaló que todos los ciudadanos ucranianos, especialmente los militares, se dan cuenta de que su presidente miente. Subrayó que "para Zelenski, los ciudadanos de Ucrania no son seres humanos, sino unidades de las que puede seguir obteniendo dinero occidental", por lo que "minimizó muchas veces las pérdidas".