El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, alcanzó los 100 días de gobierno y, en un acto oficial por su centena, reiteró sus críticas a la fiscal general, Consuelo Porras, quien en su momento boicoteó su candidatura e incluso su investidura.
"Hoy, algunos de esos actores como el Ministerio Público de Consuelo Porras, utilizan su posición para amedrentar a sus críticos, y para atacar e intentar debilitar, desde su trinchera de impunidad, al proyecto que el pueblo de Guatemala ha elegido para su futuro", fustigó.
En una céntrica avenida en Ciudad de Guatemala, situada al frente del Palacio de Gobernación, abogó por un sistema de justicia independiente con instituciones que investiguen de la mano de autoridades imparciales que no callen "de forma cínica y cómplice" ante casos de corrupción.
"No descansaremos hasta lograr, por la vía legal, la destitución de esta amenaza a la democracia", aseguró Arévalo, generando aplausos entre las personas presentes.
A principios de mes, el mandatario señaló que ya le pidió la renuncia a Porras, quien se niega a dejar el cargo. "No es un problema personal, es un problema institucional", afirmó Arévalo, quien busca que la fiscal general sea acusada penalmente por presunto incumplimiento de deberes.
- Porras estuvo a punto de dar al traste con la transición presidencial y fue acusada por Arévalo de intentar dar un golpe de Estado, debido a que la Fiscalía promovió numerosas acciones para suspender al Movimiento Semilla, la formación de Arévalo.