El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, mostró su desacuerdo con que el restablecimiento de las relaciones con México, que se rompieron luego del asalto de la fuerza pública ecuatoriana a la Embajada mexicana en Quito en abril pasado, esté condicionada a la entrega del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, detenido en esa irrupción cuando se encontraba refugiado en la sede diplomática y que actualmente está en la cárcel de La Roca en Guayaquil, provincia de Guayas.
"No me parece a mí personalmente ni al Gobierno que la única condición y la única forma de volver a establecer una relación con México es dándoles a un criminal", dijo el mandatario, en entrevista con AFP en París, Francia, en el marco de su gira por Europa.
Según el mandatario, su administración quiere tener con México "un diálogo fluido y un diálogo de paz, sin que exista intervención ni de un lado ni del otro"; y mencionó que están "dispuestos a hablar muchas cosas" e, incluso, impulsaron por mucho tiempo un tratado de libre comercio con esa nación.
"Creo que sería mejor si volvemos a tener relaciones diplomáticas con México para la lucha contra el narcotráfico, ya que uno de los grupos que operan en Ecuador son carteles mexicanos", expresó al respecto.
Pero insistió en que "si hay criminales condenados", no van a permitir "que la justicia sea burlada de esa manera"; señalando que Glas, quien ya había recibido asilo por parte de México al momento de su captura, "es una persona que ha sido condenada por dos delitos penales, de acuerdo a leyes ecuatorianas en gobiernos pasados" y "era alguien que le habían dado medidas sustitutivas para que tenga arresto domiciliario".
"Se fue a esconder a una embajada. Es el equivalente a que alguien esté dentro de la cárcel, se escape y de ahí vaya a refugiarse en una embajada. Es así de sencillo", agregó.
Confianza en la CIJ
Por otro lado, se mostró confiado en que tendrán "la razón" en la Corte Internacional de Justicia (CIJ), en La Haya, donde México presentó una denuncia contra Ecuador y Quito respondió con una contradenuncia posteriormente.
En esa instancia, en respuesta a la demanda de México, se llevaron a cabo audiencias públicas el 30 de abril y el 1 de mayo, donde ambos países presentaron sus alegatos.
"Yo creo que se va a terminar aclarando dentro de la Corte, si es que fue desnaturalizada la misma embajada. Nosotros confiamos en que vamos a tener la razón. El momento en el que se asila un criminal, ya la cosa empieza a ser intervención en asuntos nacionales, especialmente en la justicia nacional, y nosotros no estamos de acuerdo", manifestó al respecto.
A principios de mayo, la secretaria de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, mencionó que si Ecuador da "el salvoconducto" y entrega a Glas, podrían "empezar" a dialogar para desescalar el conflicto.
La funcionaria dijo entonces que Ecuador calculó mal y mostró "mucha inexperiencia" con el asalto a la Embajada y calificó como "muy mal hecho" si es que Quito entendió la concesión del asilo a Glas como un provocación por parte de las autoridades mexicanas.
Recordó que ambas naciones venían dialogando al respecto antes de que su país otorgara el beneficio al exvicepresidente.
"Glas llegó a nuestra embajada el 17 de diciembre y solicitó el asilo el 21 de diciembre. Nosotros no se lo otorgamos sin dialogar con Ecuador. No fue un acto unilateral de México; hablamos con las autoridades ecuatorianas, ellos mismos nos mandaron los expedientes legales para que pudiésemos analizar la petición. Los estudiamos y seguimos con el diálogo bilateral", contó entonces.