La "cínica y cruel" estafa de una asistente médica para aprovecharse de sus pacientes con cáncer

Una exasistente de atención médica ha sido condenada este viernes a 15 meses de prisión por fraude en el Reino Unido al aprovecharse de pacientes vulnerables con cáncer y gastar cientos de libras esterlinas de sus tarjetas de crédito.

Mira Solmaz, que trabajaba en el Hospital St Bartholomew de la ciudad de Londres, usó las tarjetas de crédito de pacientes que se encontraban bajo su cuidado durante el confinamiento en la pandemia de covid-19. El tribunal la declaró culpable de cinco cargos de fraude y tres cargos de posesión de artículos para su uso en fraude.

"Mira Solmaz violó la confianza de dos pacientes vulnerables puestos a su cuidado, donde las familias de las víctimas esperaban que sus seres queridos fueran atendidos", afirmó Stacie Cottrell, detective de la Policía de Londres.

Una de las víctimas, Hazel Longhurst, de 65 años, fue llevada al Hospital St Bartholomew en 2021 con cáncer en un momento en que los médicos le dijeron que tenía solo un 5 % de posibilidades de sobrevivir. Mientras estuvo internada durante siete meses se detectaron compras fraudulentas con su tarjeta de crédito por un valor de 1.500 libras esterlinas (1.900 de dólares).

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Tras la denuncia, las autoridades británicas realizaron una investigación del caso y se descubrió que las adquisiciones estaban vinculadas a Solmaz a través de direcciones de correo electrónico, números de teléfono y domicilios. Cuando se examinó su celular, encontraron imágenes de las transacciones bancarias.

"Ella me atacó mientras yo luchaba por mi vida. Para una persona que se supone que está en una posición de cuidado y confianza, hacer esto es pura maldad", declaró Longhurst durante el proceso judicial, quien se desempeñó 40 años como enfermera. "No podía creer que alguien pudiera estar en ese tipo de trabajo con esa responsabilidad y hacer lo que ella hizo", agregó.

Acciones "crueles, cínicas y despiadadas"

A fines de 2021, Todd Mallonee, que también estaba internado con cáncer en el mismo sanatorio, notó que faltaban su tarjeta de crédito y otros objetos, por lo que su esposa se puso en contacto con la Policía. Alrededor de 360 libras esterlinas (unos 450 dólares) en transacciones con estas tarjetas estaban vinculadas a Solmaz. Posteriormente, Mallonee falleció a la edad de 48 años.

Según los reportes judiciales, las tarjetas de ambos pacientes se habían utilizado para pagar comida a domicilio, compras de ropa y AirPods, así como para saldar deudas. El fiscal Vivek D'Cruz describió las acciones de la mujer como "crueles, cínicas y despiadadas", citado por la BBC.

Por su parte, la defensa alegó que su cliente era psicológicamente vulnerable y tenía problemas complejos de salud mental.