La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), mecanismo de Justicia transicional tras la firma del Acuerdo de Paz de 2016 en Colombia, negó la libertad "transitoria, condicionada y anticipada" del excomandante paramilitar Salvatore Mancuso.
En una publicación en su cuenta de X, la JEP anunció la medida de la Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la JEP, que también negó su libertad en calidad de gestor de paz, nombramiento hecho por el Gobierno en julio de 2023.
La sala definió que como la comparecencia de Mancuso ante ese mecanismo transicional está en estudio por la Corte Constitucional, por una "colisión positiva de competencia de jurisdicciones", la competencia de la JEP "se encuentra cuestionada".
La instancia argumentó que la solicitud de libertad de Mancuso como gestor de paz fue negada por la Sala de Justicia y Paz del Tribunal de Barranquilla. Según explicó, esta decisión fue apelada y en la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia no se resolvió el recurso "en atención al conflicto de competencias que se surte en la Corte Constitucional". Por esto, la JEP también niega la libertad de Mancuso como gestor de paz.
El pasado 22 de mayo, un tribunal del país suramericano determinó la competencia de la Corte Constitucional para resolver el conflicto jurídico y de competencias entre la JEP y la Justicia y Paz, surgida tras la desmovilización de grupos paramilitares, con miras a definir la situación jurídica del exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
La orden de libertad a favor de Mancuso fue emitida el 9 de mayo por el magistrado José Manuel Beltrán Parra, de la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá, pero su salida de la cárcel está condicionada a que no haya más requerimientos judiciales en su contra.
El excomandante paramilitar llegó a Colombia procedente de EE.UU., donde cumplió una condena de 12 años por narcotráfico desde 2008 a 2020 y luego fue retenido en un centro para migrantes irregulares hasta este año.