EE.UU. no autoriza a Ucrania a usar misiles ATACMS para atacar la profundidad de Rusia
EE.UU. no autorizó a las Fuerzas Armadas de Ucrania a utilizar los misiles táctico-operativos ATACMS para atacar la profundidad del territorio de Rusia, declaró este viernes la portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, en una rueda de prensa.
"No hemos autorizado el uso de ATACMS para capacidades de ataque profundo dentro de Rusia", anunció Singh. Además, respondiendo a una pregunta de una periodista sobre la importancia del uso de este tipo de armas por Ucrania, Singh indicó que el Ejército del régimen de Kiev tiene también "otras capacidades de largo alcance" que no fueron proporcionados por EE.UU.
No obstante, la funcionaria destacó que el Departamento de Defensa de EE.UU. siempre "se está adaptando" a los cambios en el campo de batalla y por eso su política puede cambiarse y la prohibición puede ser levantada. Según Singh, actualmente el uso de las armas contra objetivos en la profundidad de Rusia no es necesario, ya que Washington "cree que Ucrania continúa siendo exitosa en el campo de batalla" con la política estadounidense actual. "Siempre tenemos en cuenta la escalada y esa es la razón por la que nuestra política es la que es", destacó.
- En octubre del año pasado, Washington transfirió en secreto a Kiev misiles ATACMS de un alcance de unos 165 kilómetros, pero el entonces presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, insistió en que les entregaran unos de mayor alcance para que sus fuerzas puedan atacar objetivos rusos distantes.
- En abril de este año, EE.UU. suministró sigilosamente los misiles balísticos ATACMS en cuestión. El presidente Joe Biden aprobó en secreto a mediados de febrero el envío de más de 100 de esos proyectiles que tienen un alcance de hasta 300 kilómetros.
- Aunque EE.UU. mantiene la postura oficial de que estos misiles deben usarse para la "autodefensa", las fuerzas ucranianas, con la ayuda de militares estadounidenses, los han empleado para atacar objetivos civiles en Rusia. Así, como resultado del ataque perpetrado por Kiev el pasado 23 de junio contra la ciudad rusa de Sebastopol, fragmentos de la ojiva de racimo de un ATACMS cayeron sobre una playa, en la que había numerosos bañistas en ese momento. Se registraron al menos cuatro muertos, entre ellos dos niños y 153 heridos.