Decenas de personas fueron arrestadas este sábado a raíz de los disturbios que sacudieron el Reino Unido en lo que ya se califica del "peor brote de desorden civil en más de una década", informaron el domingo medios locales.
En múltiples ciudades y pueblos se produjeron choques entre manifestaciones antiimigración ilegal y contraprotestas antifascistas, en los que hubo policías atacados y heridos. Manifestantes de ambos bandos arrojaron ladrillos a los agentes, lanzaron petardos, botellas, sillas, latas y bengalas, mientras que actualmente se espera que aumente el número de detenidos.
"Cualquiera que participe en desórdenes criminales y actos violentos en nuestras calles tendrá que pagar el precio [de hacerlo] y debe esperar que haya arrestos, procesos judiciales, sanciones y todo el peso de la ley, incluidas penas de prisión y prohibiciones de viajar", advirtió el sábado la ministra del Interior, Yvette Cooper. "Hemos sido claros con la Policía en que cuentan con nuestro pleno respaldo para tomar las medidas más enérgicas posibles contra los perpetradores", agregó.
La jornada de disturbios tuvo lugar luego de que la Policía detuviera el lunes, en la localidad de Southport, a Axel Rudakubana, un joven de 17 años sospechoso de atacar una clase de baile y matar a tres niñas de 6, 7 y 9 años. Las protestas estallaron y se propagaron después que se difundiera en Internet información falsa sobre su identidad, asegurando que se trataba de un refugiado que había llegado en una patera al país. Por su parte, la Policía declaró que Rudakubana es, en realidad, oriundo de Gales.
Un factor clave en la propagación de desinformación en las redes fue el permiso de Elon Musk para que activistas de extrema derecha, como Tommy Robinson, volvieran a la plataforma X, explicó Joe Mulhall, director de investigación de la organización antifascista Hope not Hate, citado por The Guardian.
"La desinformación y la ira iniciales fueron perpetradas por individuos en Twitter [X], por ejemplo, que habían sido expulsados de la plataforma anteriormente", dijo. "Y ahora han sido restablecidos", observó.
Mientras, el propietario de X opinó que el país debería aguardar un conflicto interno. "La guerra civil es inevitable", escribió Musk comentando imágenes de las protestas.