Estados Unidos no apoya los ataques ucranianos de largo alcance con armas estadounidenses en las profundidades del territorio ruso, afirmó la subsecretaria de prensa del Pentágono, Sabrina Singh.
"No apoyamos los ataques de largo alcance en la profundidad del territorio ruso", declaró Singh, pero añadió que las armas estadounidenses podrían ser utilizadas por Kiev para "fuego cruzado".
La portavoz del Pentágono agregó que el intento ucraniano de incursión en la provincia de Kursk "es coherente" con la política de EE.UU.
Anteriormente, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, afirmó que Washington está en contacto con Kiev en relación con el intento de incursión en esa provincia fronteriza. Asimismo, aseguró que Ucrania no había notificado a EE.UU. sus planes de incursionar en ese territorio.
Como consecuencia de la agresión ucraniana, murieron al menos cuatro civiles, dos de ellos personal de una ambulancia, que fue atacada por un dron ucraniano. Al menos 66 personas, entre ellas nueve niños, resultaron heridas.
Además, uno de los militares ucranianos abrió fuego contra coches de civiles, matando a una mujer embarazada. Cuando la familia trasladó a la mujer a un hospital, los médicos intentaron reanimarla, pero sin éxito. La bala le atravesó primero un pulmón y luego el corazón.