El presidente de Argentina, Javier Milei, aseguró este viernes que, si su país vuelve a sufrir un atentado terrorista, será culpa exclusiva de la oposición que no quiere aprobar los millonarios fondos reservados a la Secretaria de Inteligencia del Estado (SIDE).
"Están soslayando que Argentina ha recibido dos tremendos atentados y justamente quien fue responsable de los atentados volvió a amenazar al país", dijo el mandatario en una entrevista con el canal oficialista La Nación +, en la que se refirió a la polémica que suscitó en abril pasado la editorial del diario Tehran Times, que advirtió que no olvidaría "la política antiraní" del actual Gobierno libertario.
"Si en Argentina llegara a tomar lugar algún atentado terrorista, es absoluta y total responsabilidad por este conjunto de irresponsables que le quitan financiamiento a la inteligencia", insistió.
También sugirió que él mismo podría ser objeto de una agresión. "Condicionarnos a nosotros, que hemos puesto las cosas en orden, es bastante raro, quizás están apostando a que pase algo, puede ser que yo les esté molestando tanto que les guste promover algo de estas características (…) puede ser que quieran hacer que alguien se ensucie las manos por eso, para eliminar gente que no les gusta", aseguró.
Argentina sufrió su primer atentado terrorista el 17 de marzo de 1992, cuando una bomba estalló en la embajada de la Israel en Buenos Aires. Dos años después, el 18 de julio de 1994, otro artefacto detonó en la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), ubicada también en la capital. Los ataques, que permanecen impunes, dejaron un saldo de 107 muertos y cientos de heridos.
El papel de Macri
Milei aprovechó este historial para justificar el decreto que emitó el mes pasado y que otorgaba un presupuesto de 100.000 millones de pesos (alrededor de 107,9 millones de dólares) a la SIDE. Al tratarse de "fondos reservados", no pueden ser auditados y son totalmente discrecionales, lo que generó una fuerte polémica ante la posibilidad de que el Gobierno se dedique a perseguir a opositores y periodistas con espionaje ilegal.
El miércoles, la Cámara de Diputados derogó la medida, que ahora pasó a su análisis en el Senado. La novedad fue que la bancada que responde al expresidente Mauricio Macri se sumó por primera vez a la oposición y sus votos fueron fundamentales para que el decreto terminara rechazado.
Esa misma noche, Milei recibió a Macri en la residencia oficial, con el fin de limar asperezas políticas que se han profundizado en las últimas semanas. Según el presidente, su antecesor explicó el porqué su partido votó contra los fondos reservados de la SIDE.
"Me dio las explicaciones y la verdad es que a mí no me resultaron satisfactorias siendo alguien que fue jefe de Estado y sabe las necesidades en términos de inteligencia que tiene que enfrentar Argentina", señaló.