La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este viernes que el presidente Javier Milei ya es prácticamente "un exlibertario" porque la realidad del país lo ha obligado a abandonar las teorías económicas que lo ayudaron a ganar las elecciones.
"A nueve meses de la llegada al Gobierno de la primera experiencia global anarcocapitalista, una vez más y como siempre, la realidad se impone sobre las
teorías extravagantes, los discursos incendiarios y las frases marketineras", afirmó la exvicepresidente en un documento titulado "Es la economía bimonetaria, estúpido", adaptación de una frase que hizo famosa el expresidente de EE.UU., Bill Clinton, durante la campaña presidencial de 1992.
A nueve meses del inicio de la actual administración, Fernández de Kirchner recordó que Milei se presentó como un "ultra libertario" que iba a eliminar la intervención y el control del Estado sobre la vida de los argentinos.
Sin embargo, agregó, su Gobierno no solo interviene y controla, sino que decide tres de los cuatro precios fundamentales de la economía: el del dólar, el del dinero y el del trabajo.
"Solo ha liberado el cuarto precio de la economía; el de los bienes y servicios", señaló en referencia a los "tarifazos" de luz, gas y transporte, entre otros.
"Si a esta forma de administrar los cuatro precios de la economía le sumamos el ajuste fiscal de Milei –que es inconsistente e insostenible porque lo logra a partir del no pago de deudas exigibles para la administración central y del retiro del Estado de las funciones imprescindibles para la subsistencia misma del país como Nación–, se produce un combo letal", explicó.
Impacto
Fernández de Kirchner agregó que la economía bimonetaria que existe en Argentina no solo ha provocado una caída brutal de la actividad económica, sino que los bienes y servicios sean más caros que en los países desarrollados.
"Esto convierte a la tasa de inflación del 3 % o 4 % mensual, que Milei y su inefable ministro de Economía quieren hacernos creer que es un éxito, en una verdadera tragedia social, al producirse en el marco de una profunda recesión económica", dijo.
El Gobierno, según Fernández de Kirchner, "no solo ha abandonado en la práctica el discurso liberal de anti-intervencionismo estatal, sino que también ha dejado de lado la teoría monetarista, que señala a la emisión monetaria como la única y exclusiva causa de la inflación".
Muestra de ello, para la exvicepresidenta, es que los funcionarios ya reconocieron en reiteradas oportunidades que no van a devaluar porque sube la inflación, a pesar de que antes negaban que la el aumento de precios estuviera atado al movimiento del dólar.
"Curiosa paradoja de quien se cree líder amado y admirado a nivel global, pero al que nadie le presta un dólar. A esta altura de la soirée casi, casi que tenemos que hablar de Milei, el exlibertario", expresó.
Prioridades
La exmandataria justificó el título de su escrito con el argumento de que el Gobierno debe entender que en Argentina existe una economía bimonetaria en la que el peso circula para transacciones cotidianas y el dólar, para la compra de inmuebles, el ahorro y el pago de importaciones.
"Este fenómeno sucede únicamente en la Argentina. La utilización de dos monedas, de las cuales la que no emitimos es precisamente la más requerida para atesorar legal o ilegalmente, sustrayéndola del circuito de funcionamiento de la economía y formando activos en el exterior o, en menor medida, guardándolos 'en el colchón'", precisó.
En ese bimonetarismo, insistió, se basa gran parte de las actuales dificultades de la macroeconomía del país sudamericano.
"Abordar el problema de la economía bimonetaria y su correlato, la carencia de una moneda fuerte, es lo que debería movilizar a las fuerzas políticas y sociales que siguen creyendo en la Nación. Sin embargo, cuando la antipolítica se quede sin respuestas por el fracaso de teorías extravagantes que solo causan odio y dolor; no solamente deberemos reconstruir la moneda, sino también la política", advirtió.