El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó este lunes dos de sus reformas constitucionales durante la última emisión de su acostumbrada rueda de prensa matutina, un día antes de la ceremonia de traspaso de mando a su sucesora Claudia Sheinbaum.
López Obrador sancionó las reformas constitucionales del estatuto de la Guardia Nacional, horas más tarde de que el Senado mexicano la declarara constitucional, y de los pueblos indígenas y comunidades afromexicanas.
Sobre la creación de la Guardia Nacional, expresó que esta institución —que ya cuenta con 130.000 elementos y 500 cuarteles— busca garantizar la seguridad pública.
"Es una institución acreditada para proteger a los ciudadanos", manifestó.
Recordó que se logró que la Guardia Nacional pase a formar parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), "lo que le va a dar solidez, permanencia, disciplina y manejo honesto, sobre todo el que no se vincule con la delincuencia organizada y de cuello blanco".
Derechos para el "México profundo"
Del mismo modo, consignó la reforma constitucional sobre los pueblos indígenas y comunidades afromexicanas, a la que vincula "con el México profundo" y con los derechos de los pueblos originarios.
Esta reforma propone que se reconozca en la carta magna el derecho público de los indígenas y afromexicanos a una personalidad jurídica y a patrimonio propio. Asimismo, plantea que estas comunidades sean consultadas previamente sobre las decisiones legislativas o administrativas que las afecten.
Por otra parte, también se establece que se debe otorgar asistencia jurisdiccional a los indígenas que lo soliciten, a través de intérpretes, traductores, defensores y peritos.