La inflación de septiembre en Argentina registra el nivel más bajo de la era Milei
Argentina registró en septiembre un índice de inflación de 3,5 %, el más bajo en lo que va de 2024, y acumula 209 % en los últimos doce meses, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El Índice de Precios al Consumidor (IPC), que publica mensualmente el organismo, señala un incremento de 101,6 % en los primeros 9 meses del año.
El rubro de mayor aumento en el mes fue vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (7,3 %) por las subas en alquileres de la vivienda y gastos conexos. Le siguió prendas de vestir y calzado (6,0 %), por razones estacionales de cambio de temporada, informó el Indec.
#DatoINDECLos precios al consumidor (#IPC) aumentaron 3,5% en septiembre de 2024 respecto de agosto y 209% interanual. Acumularon un alza de 101,6% en los primeros nueve meses del año https://t.co/KkdxyASmy6pic.twitter.com/1twqxwnuuN
— INDEC Argentina (@INDECArgentina) October 10, 2024
La inflación general del mes fue la más baja desde noviembre del 2021 (2,5 %).
El vocero presidencial, Manuel Adorni, celebró el dato desde su cuenta de la red social X y comparó la gestión económica de Javier Milei con la de su antecesor, el peronista Alberto Fernández.
"En septiembre de 2024 la inflación fue del 3,5 %. En este mismo (mes) durante el año pasado el incremento de precios había sido del 12,7 %. A diferencia de aquellos temerosos tiempos, hoy ya no padecemos la regulación compulsiva de precios, ni la ley de góndolas, ni la ley de abastecimiento, ni la brecha cambiaria ni un oscuro futuro hiperinflacionario", manifestó Adorni.
También se pronunció al respecto el ministro de Economía argentino, Luis 'Toto' Caputo: "El proceso de desinflación continúa y el rumbo de ortodoxia fiscal y monetaria no cambiará", comentó.
La desaceleración de precios es sostenida desde el salto inflacionario récord que se vio en diciembre (25,5 %), apenas asumió el Gobierno libertario, empujada por una devaluación del 50 %.
A partir de allí, el fuerte ajuste aplicado por la Casa Rosada en la economía derivó en un cuadro recesivo en el consumo y la producción por la pérdida del poder adquisitivo de salarios y jubilaciones. Así se mantuvo la inflación en declive hasta el leve salto observado en junio.
La calma de la inflación fue celebrada por el Gobierno, al punto que aseguró en agosto que el tema "va a ir quedando atrás".