La marca estadounidense de utensilios de cocina Tupperware Brands, conocida mayormente por sus coloridos recipientes herméticos para alimentos, acordó este martes vender su negocio a un grupo de prestamistas por 23,5 millones de dólares en efectivo y más de 63 millones de dólares en alivio de la deuda, informa Reuters.
El nuevo acuerdo de venta permitirá a los prestamistas usar la cancelación de la deuda como parte del pago, pero también tendrán que aportar algo de efectivo que la empresa pueda usar para pagar otras deudas. Sin embargo, al acordar vender su negocio, la compañía decidió cancelar la idea de subastar sus activos en el mercado abierto.
¿Qué pasó?
El mes pasado, la empresa se declaró en bancarrota tras varios años de lucha contra su caída de ventas, el aumento de las deudas y la fuerte competencia y solicitó protección bajo el Capítulo 11 en Delaware (EE.UU.), lo que le permitía reorganizar sus propiedades sin necesidad de liquidar todos sus bienes. No obstante, la compañía no logró reclamar los activos para sí misma y se quedó con una deuda de 818 millones de dólares y un plan para encontrar un comprador en un plazo de 30 días.
Tupperware fue fundada en 1946 y en las décadas de 1950 y 1960, se labró una reputación de empresa innovadora, siendo la primera en introducir en el mercado los envases de plástico herméticos. El éxito de la compañía en el siglo XXI alcanzó su pico en 2013, cuando obtuvo 274 millones de dólares en beneficios y 2.700 millones de dólares en ingresos.
No obstante, después de eso, tanto las ventas como el valor de las acciones de la marca disminuyeron constantemente a medida que el principal modelo de negocio de la empresa, la venta directa al consumidor a través de minoristas, fue perdiendo popularidad.