La Fiscalía del estado de Ohio (EE.UU.) ha presentado cargos de homicidio involuntario contra dos agentes de Policía en relación con la muerte en abril de un hombre afroamericano cuando lo estaban deteniendo, informó CBS News.
El caso
Frank Tyson, de 53 años, sospechoso de abandonar la escena de un accidente de tráfico, murió el pasado 18 de abril, cuando los agentes Beau Schoenegge y Camden Burch lo tiraron al suelo y lo esposaron en un bar. Ante la resistencia del hombre, uno de ellos le puso la rodilla en la espalda, cerca del cuello, durante unos 30 segundos, mientras Tyson le decía que no podía respirar.
El policía respondió entonces: "Estás bien", y le pidió que se calmara mientras los agentes hablaban y bromeaban con las demás personas que se encontraban en el bar. Los agentes se dieron cuenta demasiado tarde de que el detenido se encontraba en estado crítico y posteriormente falleció en el hospital.
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La víctima de homicidio
Ahora el fiscal del condado de Stark, Kyle Stone, ha revelado que un gran jurado ha presentado cargos por delito grave y que la pena máxima es de 36 meses de cárcel y una multa de 10.000 dólares. Los policías han sido llevados a la cárcel del condado.
Anteriormente se informó que el médico forense del condado dictaminó que la muerte de Tyson fue un homicidio, citando enfermedades del corazón y la intoxicación por cocaína y alcohol como factores contribuyentes. El hombre había salido de la prisión estatal poco antes del incidente, tras 24 años de cárcel por un caso de secuestro y robo, pero inmediatamente volvió a infringir la ley al no presentarse ante su agente de la libertad condicional.