El alcalde de la ciudad ucraniana de Boríspol, Vladímir Borisenko, ha amenazado con una "purga global" del actual Gobierno ucraniano si continúa la persecución a la oposición en el país.
"Al parecer, las autoridades están enfermas. La salida es una purga global. Y si lo hacen los militares, no les gustará, créanme. Así que piénsenlo", dijo Borisenko en un video publicado en el canal de Telegram del partido Solidaridad Europea.
El jefe de la ciudad denunció que, "en un momento difícil en el frente, cuando hay que unirse, las autoridades persiguen a la oposición".
Previamente, el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, impuso sanciones personales contra el expresidente y líder del partido opositor Solidaridad Europea Piotr Poroshenko; el empresario y oligarca ucraniano Ígor Kolomóiski; el opositor y fundador del movimiento Otra Ucrania, Víktor Medvedchuk; y contra los empresarios Konstantín Zhevago y Guennadi Bogolyubov.
Las sanciones se impusieron por tiempo indefinido e incluyen la privación de premios estatales, el bloqueo de activos, la prevención de la retirada de fondos más allá de las fronteras de Ucrania y la rescisión de acuerdos comerciales y la realización de operaciones comerciales.
Poroshenko calificó las sanciones en su contra de "provocación" y "decisión inconstitucional y políticamente motivada". "Este crimen tiene muchos cómplices: todo el equipo de [Vladímir] Zelenski, el gabinete de ministros, que se empeñó en una actuación absurda, y los miembros de su Consejo de Seguridad Nacional y Defensa. Pero solo hay un ordenante, ejecutor y firmante: Zelenski personalmente", escribió en sus redes sociales.
Previamente, el partido Solidaridad Europea ya denunció que la oposición ucraniana está sometida a presiones políticas mediante la reapertura de antiguas y nuevas causas penales contra los diputados de la facción y sus familiares.