Un país europeo encuentra una manera de 'complacer' a EE.UU. en la guerra arancelaria

De acuerdo con el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, este país resolverá la situación con los aranceles "con el tiempo".

Durante las negociaciones comerciales en curso, Suiza está ofreciendo comprar más armas y productos energéticos de EE.UU. y realizar más inversiones en el país norteamericano con el objetivo de lograr la reducción de los aranceles impuestos por la Administración de Donald Trump a causa del déficit comercial de 39.000 millones de dólares que favorece al país europeo, reporta Financial Times.

Después de que el presidente estadounidense anunciara gravámenes del 39 % a las importaciones suizas, unos de los más altos a nivel mundial, Berna ha iniciado negociaciones con Washington para llegar a un acuerdo que ajuste la tasa. "Últimamente hemos logrado buenos avances. Las negociaciones siguen en curso, pero no tengo esperanzas de que se llegue a un acuerdo inminente", declaró Rahul Sahgal, director ejecutivo de la Cámara de Comercio Suizo-Estadounidense.

A su vez, un funcionario estadounidense confirmó que las partes todavía están analizando la posibilidad de concertar un acuerdo comercial, pero no proporcionó más detalles.

De acuerdo con dos personas cercanas a las negociaciones, Berna ha ofrecido a Washington comprar más armas y energía estadounidense, incluidos uranio enriquecido y gas natural licuado, así como ha hecho nuevas promesas de invertir más en su economía.

Tras sus conversaciones en Washington con el ministro de Economía suizo, el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, declaró que el país helvético "resolverá su situación con el tiempo".

A finales de julio, un día antes de que EE.UU. anunciara nuevos aranceles sobre decenas de países, la presidenta suiza, Karin Keller-Sutter, mantuvo una "desastrosa" conversación telefónica con Trump, en la que no consiguió acordar un arancel del 10 % para su país.

Tras la llamada, la mandataria se apresuró a viajar a Washington para intentar hacer que Trump cambiara de postura, pero regresó a Berna con las manos vacías. Si bien Keller-Sutter participará en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde el presidente estadounidense también estará presente, aún no se ha confirmado una reunión bilateral y no está prevista otra visita a la Casa Blanca, según personas conocedoras del asunto.