Moscú: Nuestra respuesta a la congelación de activos rusos por la UE no se hará esperar

"No importa qué trucos pseudolegales utilice Bruselas para justificarlo, estamos ante un caso de robo puro y simple", subrayó la vocera de la Cancillería rusa, María Zajárova.

La respuesta de Rusia a la congelación de sus activos soberanos por parte de la Unión Europea no tardará en llegar, advirtió este sábado la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova.

"Nuestra respuesta no se hará esperar", afirmó en respuesta a la decisión del bloque comunitario de bloquear indefinidamente los activos del Banco Central de Rusia que se encuentran congelados en Europa y la iniciativa de usarlos para financiar Ucrania. "Tales delitos no quedan sin consecuencias en las relaciones internacionales", subrayó.

"Un caso de robo puro y simple"

La vocera enfatizó que cualquier acción de la UE con los activos soberanos rusos (bloqueo indefinido, incautación o el llamado 'crédito de reparaciones') sin el consentimiento de Moscú constituye "una grave violación del derecho internacional". "No importa qué trucos pseudolegales utilice Bruselas para justificarlo, estamos ante un caso de robo puro y simple", subrayó.

Zajárova apuntó que resulta revelador que "la Comisión Europea justifique sus propuestas de uso indebido de activos rusos citando disposiciones del marco jurídico de la UE, que prevén la posibilidad de tomar medidas de emergencia ante una difícil situación económica" dentro del propio bloque. "Así pues, la propia UE se está exponiendo: no se trata solo de financiar un proyecto ucraniano fallido, sino también de un claro deseo de mejorar la situación económica utilizando miles de millones de las reservas estatales rusas", continuó.

Asimismo, señaló que el intento de demostrar la supuesta "unidad" de la región fracasó estrepitosamente, ya que "los representantes de varios Estados miembros de la Unión Europea han declarado abiertamente su rechazo categórico al plan manifiestamente fraudulento perpetrado por la Comisión Europea, con el apoyo de capitales agresivamente rusófobas de la UE, en relación con los activos rusos".

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