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EE.UU. condena a 10 años de prisión a un militar por la masacre de 1982 en Guatemala
La justicia estadounidense condenó el lunes a 10 años de prisión al exsubteniente guatemalteco Jorge Sosa Orantes, de 55 años de edad, implicado en la matanza de campesinos de Guatemala de 1982 y acusado de mentir para ocultar su pasado militar.
"Jorge Sosa ayudó a orquestar la matanza despiadada de campesinos inocentes, incluyendo docenas de niños, y luego mintió sobre su pasado para obtener refugio en EE.UU.", dijo la Fiscal General adjunta, Mythili Raman, en un comunicado que difundió tras dictarse la sentencia, según la agencia de noticias Reuters. Al exmilitar le privaron también de su ciudadanía estadounidense.
Según la fiscalía, Sosa lideró el tristemente famoso pelotón de Kaibil formado por cerca de 40 hombres que en diciembre de 1982 asaltó la aldea Dos Erres, un episodio calificado como el más sangriento de todos los 36 años de la guerra civil en Guatemala. En la ofensiva, los militares asesinaron sistemáticamente a 201 residentes del pueblo, 67 de ellos menores de 12 años. Según testigos, el entonces subteniente disparó en persona contra el pozo en el que sus hombres habían recluido a los lugareños, que gritaban y suplicaban, y no intervino mientras los soldados bajo su mando violaban y asesinaban a las mujeres locales.
Sosa fue arrestado en 2011 en Canadá, donde también goza de ciudadanía, y fue extraditado a EE.UU. Según las autoridades estadounidenses, es posible que tras cumplir con su plazo carcelario en el territorio del país, el exmilitar sea deportado a Guatemala, que pide su extradición para procesarlo por la masacre. En agosto de 2011 la justicia guatemalteca condenó a cuatro agresores de Dos Erres a 6.060 años de prisión cada uno.
Según la fiscalía, Sosa lideró el tristemente famoso pelotón de Kaibil formado por cerca de 40 hombres que en diciembre de 1982 asaltó la aldea Dos Erres, un episodio calificado como el más sangriento de todos los 36 años de la guerra civil en Guatemala. En la ofensiva, los militares asesinaron sistemáticamente a 201 residentes del pueblo, 67 de ellos menores de 12 años. Según testigos, el entonces subteniente disparó en persona contra el pozo en el que sus hombres habían recluido a los lugareños, que gritaban y suplicaban, y no intervino mientras los soldados bajo su mando violaban y asesinaban a las mujeres locales.
Sosa fue arrestado en 2011 en Canadá, donde también goza de ciudadanía, y fue extraditado a EE.UU. Según las autoridades estadounidenses, es posible que tras cumplir con su plazo carcelario en el territorio del país, el exmilitar sea deportado a Guatemala, que pide su extradición para procesarlo por la masacre. En agosto de 2011 la justicia guatemalteca condenó a cuatro agresores de Dos Erres a 6.060 años de prisión cada uno.
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