Bielorrusia afronta nuevas sanciones de Occidente
La UE aprobó este lunes las sanciones contra el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, y 157 altos funcionarios de dicho Estado, exigiendo así la libertad de los centenares de manifestantes que protestaron por la victoria del mandatario en las elecciones presidenciales del 19 de diciembre.
La decisión, tomada por los ministros de Relaciones Exteriores de la UE reunidos en Bruselas, prevé la congelación de las cuentas bancarias de estas personas y la negación de visados a los funcionarios de Bielorrusia que figuren en la 'lista negra'.
Se ha informado además que entre los sancionados figuran dos hijos de Lukashenko, Víktor y Dimitri; el titular de Defensa, Yuri Zhadobin; el jefe del KGB, Vadim Zaytsev; entre otros. Entre los altos mandos de la república, no figuran en la lista tan solo el jefe de la diplomacia bielorrusa, Serguei Martinov, y vicepresidente del Gobierno, Vladímir Semashko.
A su vez, este mismo lunes -tal como se había aunuciado el 27 de este mes-, EE. UU. dio a conocer su nuevo paquete de sanciones, declarando, a través del portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley, que su decición "responde a las severas y brutales medidas tomadas por el presidente Lukashenko y el gobierno de Bielorrusia, tras la elección presidencial del 19 de diciembre de 2010."
En concreto, la administración de EE. UU. revocó la licencia que permitía las relaciones comerciales entre los ciudadanos estadounidenses y dos filiales de Belneftejim, la empresa estatal bielorrusa de hidrocarburos. Otra medida de Washington fue la de “ampliar de manera importante" la lista de funcionarios bielorrusos a quienes se les prohíbe el otorgamiento de visados.
Por su parte, el Gobierno de Bielorrusia, pocas horas después de que se anunciaran las medidas de la UE, afirmó que adoptará medidas proporcionales y adecuadas.