Anna Politkóvskaya, nuevos detalles a cinco años de su asesinato

La gente acude al hogar de la asesinada periodista rusa Anna Politkóvskaya para rendirle homenaje en el quinto aniversario de su muerte. Y en el plano judicial, la fiscalía planea presentar acusaciones a varias personas relacionadas con la causa. Pero según el representante del comité de investigación, el proceso se prolongaría para uno de los implicados, ya que éste rechazó la asistencia de un abogado.

Con el paso de los años, este caso revela nuevos datos. Vera, la hija de Anna Politkóvskaya, tenía 26 años cuando su madre fue brutalmente asesinada. La encontraron en el portal de su casa, en el centro de Moscú, con varias heridas de bala, una de ellas en la cabeza.

“Ese día yo estaba de compras y hablé con mi madre por teléfono varias veces. En un momento dado necesité su consejo, pero ella ya no respondió. Conociéndole bien, sabía que o no escuchó la llamada, o había dejado el celular en el coche. Entonces me llamó mi hermano, que quedó con ella para ayudarle a subir unas cosas al piso, pero tampoco pudo contactar con mamá. Ahí empezamos a preocuparnos. Él llegó al lugar primero y me llamó”, recuerda Vera.

El 7 de octubre de 2006 cuando ocurrió el crimen, Vera -también periodista- estaba en el cuarto mes de embarazo. Toda la familia estaba ilusionada con la nueva vida que estaba en camino y nadie podía imaginar que antes del nacimiento les esperaría un suceso tan horrible. Vera decidió dar a su hija el nombre de Anna, y decidió dejar el trabajo para dedicarse por completo a ella.

“Sé que suena raro, pero agradezco a Dios que no me haya quedado sin madre cuando tenía cinco, 10 o 15 años. Cuando fue asesinada, yo ya era una persona madura y no me quedé sola en esta enorme ciudad. Ahora tengo una niña pequeña y para mí lo más importante es criarla. Cuando ella crezca, cuando pueda seguir adelante en este mundo sin mí, entonces creo que ya podré volver a pensar en el periodismo”, confiesa.

Durante los últimos meses la investigación ha dado frutos. En mayo de este año en el Cáucaso capturaron a Rustam Majmúdov, la persona que supuestamente realizó los disparos. En agosto, la fiscalía detuvo al ex teniente coronel de la policía rusa, Dmitri Pavliuchénkov, sospechoso de proporcionar información sobre Anna, así como el arma con la que la mataron. De acuerdo con los testimonios del ex oficial, fue un líder criminal checheno quien recibió el encargo de asesinar a Politkóvskaya por parte de una persona, cuya identidad aún no se conoce. Los compañeros de Anna en ‘Novaya Gazeta’, el periódico en el que trabajaba, ayudaron en la búsqueda.

“Mientras llevábamos a cabo nuestra propia investigación, compartíamos información con las autoridades. Esperábamos la noticia del arresto, aunque no sabíamos con seguridad cuándo iba a ocurrir. Consideramos que la resolución del caso va por buen camino y les deseamos mucha suerte”, asegura Serguéi Sokolov, redactor jefe adjunto de ‘Novaya Gazeta’.

El caso de Politkóvskaya provocó mucho interés de los medios de comunicación, tanto rusos, como internacionales. La actividad de Anna fue reconocida por los defensores de los derechos humanos. Fue una periodista destacada que publicó varios libros y reportajes sobre los crímenes cometidos en la República rusa de Chechenia. Su labor está considerada como la causa principal de su asesinato. Pocos días después de la muerte de Politkóvskaya, el actual primer ministro ruso, Vladímir Putin, dio su opinión sobre lo sucedido a los periodistas extranjeros.

“El asesinato de una persona así, el asesinato brutal de una mujer, una madre, está dirigido en contra de Rusia y en contra de las actuales autoridades de Rusia. Este asesinato causa más daño a Rusia y a las autoridades, tanto de Rusia como de la República de Chechenia, que sus publicaciones”, dijo Putin.

El entonces presidente ruso añadió que los organizadores de este cruel acto debían ser encontrados y castigados. Las piezas de este rompecabezas poco a poco están encajando.

Cinco años después de la muerte de Politkóvskaya, que fue asesinada en el portal de su casa, la gente sigue acudiendo hasta ese lugar para rendir homenaje a la destacada periodista. Y pese a que la investigación del caso ya ha dado resultados, aún queda mucho por aclarar.