Nuevos detalles sobre la vida privada del psiquiatra que mató a 13 hombres en Texas
Las autoridades afirman que el mayor Nidal Malik Hasan, que mató a 13 personas durante la masacre en la base más grande de Fort Hood, Texas, preparaba esta acción. La policía analiza su casa en Killeen, Texas, su computadora y su basura, para encontrar el motivo por el que un psiquiatra que asistía a los soldados y les curaba, abrió fuego sobre ellos. Ahora Hasan yace en coma tras recibir cuatro balazos. Pero algunas de sus víctimas tienen heridas sumamente graves y podrían no sobrevivir, superando la cifra de 13 muertos.
Según los funcionarios militares de EE.UU., éste ha sido el peor ataque en una base militar en territorio estadounidense. Algunos dicen que Hasan gritó "Alahu Akbar" (en árabe significa "¡Dios es grande!", convertido en lema de los terroristas musulmanes), antes de empezar a disparar. Pero esto todavía no se ha confirmado. El jefe del Estado Mayor del Ejército, George Casey, tema que este hecho provocaría represalias contra los soldados musulmanes en el ejercito estadounidense. El pidió revisar las medidas de seguridad en todas las bases.
La familia de Hasan, que procede de Palestina, tildó sus acciones de "despreciables y deplorables".
"Nuestra familia está llena de pena por las víctimas de la tragedia de ayer y sus familias", dijo Nader Hasan, primo del psiquiatra. "Estamos afligidos por lo que pasó y no hay ninguna justificación para lo que sucedió. Todos nos preguntamos por qué sucedió esto y la respuesta es que, simplemente, no sabemos".
Hasan iba a ser enviado en breve a Afganistán para ayudar a los soldados que padecían estrés causado por el combate. Antes de la masacre, el mayor se había despedido de sus vecinos regalándoles algunas cosas.
Hasan dijo al dueño del complejo de departamentos donde vivía, José Padilla, que dejaba el lugar esa misma semana. Le preguntó su idioma natal y después le regaló un Corán en español, negándose a recuperar los 400 dólares de depósito del apartamento. "No puedo entender que el enemigo estaba entre nosotros", dijo Padilla. "Siento un poco de culpa porque básicamente le estaba dando vivienda a alguien que iba a causar tanta destrucción". Hasan le dio verduras, un colchón y un Corán a otra vecina, ofreciéndole 60 dólares para que limpiara su apartamento después de que se marchara. Otros vecinos suyos recibieron sólo un breve mensaje: "Quería agradecerle a Willie por ser un buen amigo y por estar ahí para apoyarme".
En agosto un soldado que acababa de regresar de Irak rayó el automóvil de Hasan cuando vio una calcomanía que decía: "Alá es amor". La reparación costaría casi 1.000 dólares. Hasan cambió el coche y perdonó todo al soldado porque era Ramadán, el mes en el que los musulmanes realizan un ayuno diario. Según sus vecinos, no parecía muy enojado. También sus familiares subrayan que siempre estaba en contra del extremismo y en contra de las guerras de Estados Unidos en países musulmanes. Val Finnell, compañero de clase de Hasan en la Universidad de Ciencias de la Salud de los Servicios Militares en Bethesda, Maryland, recuerda que el psiquiatra en una ocasión dijo que la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo era una guerra contra el Islam y que ésta se había convertido "en un pararrayos" de los problemas interiores.