La Liga Árabe no le quita ojo a Siria: su misión de observadores se queda en el país
Los cancilleres de los estados que componen la comisión de la Liga Árabe para el arreglo de la situación en Siria han decidido mantener a sus observadores en este país, informó la agencia de noticias egipcia MENA.
"Los observadores tendrán así tiempo suficiente" para continuar su misión, asegura el comunicado de la Liga Árabe.
Así las cosas, los observadores árabes prolongarán su misión en Siria al menos durante tres semanas más. Este domingo los ministros de Exteriores de los países de la Liga escucharon el informe de gestión de los primeros diez días, que fue presentado por el jefe de la misión observadora, el general sudanés Mohamed al Dabi.
A finales del primer mes de trabajo el general presentará su informe al secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, y éste último lo remitirá al grupo de contacto, formado por Catar, Argelia, Sudán, Omán y Arabia Saudí. Asimismo, se decidió que Al Arabi se ponga en contacto con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Según varios representantes de la oposición siria, la gestión de los observadores no está siendo lo suficientemente eficaz. En particular se indica que el derramamiento de sangre en el país no cesó tras su llegada, ya que perecieron centenares de personas, mientras que las autoridades sirias siguen sin respetar los compromisos asumidos de frenar la violencia y crear las condiciones favorables para el trabajo de los observadores.
Esta supervición de la situación en Siria in situ forma parte del plan de la Liga Árabe para crear condiciones favorables para el diálogo entre las autoridades y la oposición. El grupo de observadores de la Liga Árabe comenzó su misión en Siria el pasado 26 de diciembre y está integrado por más de 165 especialistas que han visitado varias ciudades sirias, escenario de sangrientos choques entre el ejército sirio y la oposición, tales como Homs y Deraa.
Buques de guerra rusos llegan a Siria
Mientras tanto, buques de guerra rusos que se encontraban en el Mar Mediterráneo, con el crucero-portaaviones pesado 'Almirante Kuznetsov' a la cabeza, entraron en el puerto sirio de Tartous, donde se encuentra su base de abastecimiento técnico y su taller de reparaciones.
Además del portaaviones, este grupo ruso de navíos de guerra está integrado por buques de las flotas del Norte, del Báltico y del Mar Negro que participan en ejercicios navales en el Mediterráneo desde el pasado mes de diciembre.
La agencia informativa siria SANA ya ha calificado la visita de la flota rusa de “manifestación de solidaridad”, como la calificó un oficial anónimo de uno de los buques rusos.
Por su parte, el ministerio de Defensa ruso insistió en que el pasado mes de noviembre ya notificó que la visita estaría relacionada con las maniobras y no con la aguda situación que vive Siria.
La armada rusa permanecerá en el puerto de Tartous seis días.