Manifestantes atacan varias embajadas sirias alrededor del mundo
Manifestantes atacaron siete embajadas sirias alrededor del mundo después de conocerse el episodio más sangriento del conflicto en Siria entre el Gobierno de Bashar al Assad y los opositores que lleva casi un año. La muchedumbre ha destrozado las oficinas de los diplomáticos desde Londres a Australia y han prendido fuego a la embajada en El Cairo.
Los activistas dicen que las fuerzas sirias mataron a más de 200 personas en la ciudad de Homs antes de la madrugada del sábado, asolando zonas de conflicto con morteros y artillería. El Gobierno niega los informes.
La Policía turca se ha visto obligada este domingo a hacer uso del gas lacrimógeno para ahuyentar a los manifestantes sirios que han querido atacar el consulado de Siria en Estambul. La Policía australiana dijo que la muchedumbre irrumpió el sábado por la noche en la embajada siria en Canberra, la capital australiana, causando considerables daños a la planta baja del edificio de dos pisos.
Los manifestantes también intentaron tomar la embajada siria en Londres el sábado. La Policía británica debió hacer uso de la fuerza para hacerlos retroceder en un segundo intento. Un total de 12 manifestantes fueron detenidos.
Una escena similar tuvo lugar en Atenas, donde la Policía dijo que 13 personas fueron detenidas después de entrar a la fuerza en la embajada siria. En Alemania 20 personas intentaron abruptamente ingresar en la embajada de Siria en Berlín el viernes y dañaron oficinas, informó la Policía de la capital alemana.
Los manifestantes sirios en El Cairo prendieron fuego a parte de la embajada el viernes por la noche, mientras los protestantes en Kuwait rompieron ventanas del edificio diplomático e izaron la bandera de la oposición. La agencia de noticias de Kuwait dijo que el personal de seguridad resultó herido como resultado de las riñas. Aproximadamente 300 exiliados sirios y partidarios libios también ocuparon la embajada siria en Trípoli y colgaron la bandera de la oposición en la puerta.
También hubo protestas en la embajada de Siria en Túnez, donde se decidió expulsar al embajador de Siria y se dejó de reconocer el régimen del presidente Bashar al Assad en respuesta a lo que denominaron una "masacre sangrienta" en Homs.
El Gobierno de Siria ha calificado las noticias sobre el ataque en Homs como una "campaña histérica" promovida por grupos armados en contra de Siria, pensada para reforzar el proyecto de resolución que ha sido votado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y apoya al llamamiento árabe a Assad para que deje el poder. Rusia y China vetaron la resolución a pesar de las negociaciones de última hora.