Stratfor tenía una “acusación secreta” contra Assange
Hace más de un año, EE. UU. preparó una secreta "acusación sellada" contra Julian Assange. Eso revelan las filtraciones de WikiLeaks de millones de correos electrónicos internos de Statfor, la agencia de inteligencia llamada también una 'CIA en las sombras'.
Según los documentos de Stratfor, Fred Burton, vicepresidente de la agencia, advirtió a sus subalternos de los preparativos de una formal "confidencial" por espionaje contra el fundador de WikiLeaks.
El año pasado, los medios estadounidenses ya ventilaban que EE. UU. no podría apresar a Julian Assange por este delito ya que no se le encontraron pruebas que lo vincularan directamente con su presunto informante, el soldado Bradley Manning.
Burton, ex agente del Departamento de Lucha contra el Terrorismo, puso fin a estas especulaciones. "Tenemos una acusación sellada contra Assange", escribió en un comunicado interno, en el que también llamó a “proteger” esta información sensible.
"La venganza es un plato que se sirve frío"
Con esta frase, Burton festejó el arresto de Assange por la policía londinense, que en nombre de las autoridades suecas lo detuvieron en diciembre del 2010 para que respondiera por delitos sexuales.
Mientras esto pasaba, Stratfor vigilaba cuidadosamente los acontecimientos en torno a su detención. Los analistas de Stratfor ansiaban acceder a los archivos cifrados que publicó Wikileaks e incluso sugirieron torturar a Assange para lograrlo. Burton casi no podía ocultar su impaciencia por ver a Assange en manos de la justicia estadounidense.
"Su cabeza tiene que ser sumergida en agua hasta que nos diga el código", propuso. De los documentos filtrados hay uno en el que el vicepresidente de la agencia y experto en tácticas antiterroristas seriamente reitera sus intenciones de ver “la cabeza de Assange sumergida en un inodoro lleno de Guantánamo".
Sin embargo, las comunicaciones internas de Stratfor evidenciaban que había escepticismo entre sus analistas y dudaban de que prosperaran las acusaciones de delitos sexuales, además de la capacidad de los británicos para encontrar las 'pruebas' que lo relacionaran directamente con Manning. Así, el analista Ben West consideró a Assange "demasiado inteligente" para hacer públicos "los materiales sensibles" que lo vincularan con Manning, con los que las autoridades británicas posteriormente podrían haber descubierto sus relaciones.
¿Qué hay detrás de la acusación secreta?
A pesar de la divulgación de los correos electrónicos, no está claro si Stratfor realmente tenía una acusación formal secreta preparada contra Assange, ya que la empresa se niega a hacer comentarios sobre la reciente filtración de su base de datos. Al respecto solo ha manifestado que la fuga de información fue "una deplorable violación a la intimidad, lamentable e ilegal".
Mientras tanto, el Departamento de Justicia de EE. UU. tampoco ha comentado si hubo alguien o alguna empresa trabajando en una acusación secreta contra el fundador de WikiLeaks, según informa el sitio rawstory.com.
Actualmente, Estados Unidos quiere que Assange testimonie en contra del ex soldado estadounidense Manning, a quien acusa de espionaje y de colaborar con el enemigo. No obstante, es probable que Assange se enfrente a los mismos cargos si encara a la justicia de ese país.
El 27 de febrero pasado, WikiLeaks comenzó la divulgación de más de cinco millones de correos electrónicos 'hackeados' de la base de datos de Stratfor. Los correos, fechados entre julio del 2004 y diciembre del 2011, relevan que la agencia recababa y pagaba informes confidenciales de sus fuentes, entre ellas funcionarios de alto nivel, y luego los pasaba a grandes corporaciones y al gobierno estadounidense.
Assange apela su extradición a Suecia, donde lo requieren por denuncias de agresión sexual. Su defensa alega que su extradición a Suecia sería "injusta e ilegítima" y que una vez en ese país, podría ser extraditado a EE. UU.
Los fiscales estadounidenses insisten en que pueden comprobar la conexión entre Manning, Assange y WikiLeaks, pero las pruebas no son más que meras suposiciones. De momento, la investigación se basa en los registros del chat del soldado Bradley Manning, de 24 años, en cuyas conversaciones menciona a WikiLeaks y se llama a sí mismo 'informante'.