Errores de instituciones polacas provocaron el siniestro del avión presidencial
La descoordinación entre diferentes instituciones públicas de Polonia fue una de las causas que el 10 de abril de 2010 provocó la catástrofe del avión del presidente del país, Lech Kaczynski, y acabó con la vida de otras 95 personas, según un informe redactado por la Alta Cámara de Control de Polonia.
Tras analizar las acciones de diferentes entidades públicas vinculadas con el control de la seguridad de los vuelos de los miembros del Gobierno en el periodo que va desde 2005 hasta 2010, los expertos concluyen que la interacción de estas organizaciones era un caos.
La investigación realizada reveló que el avión presidencial no tenía permiso para dirigirse al aeropuerto militar ruso de Smolensk Séverni, porque este no formaba parte del registro oficial polaco de aeropuertos operativos.
Según los expertos, si aquel día se hubieran cumplido todos los procedimientos necesarios, el avión de Kaczynski habría aterrizado en un aeropuerto grande cercano a la ciudad de Smolensk. Tras realizar el chequeo necesario de Smolensk Sévirni, deberían haber trasladado al presidente a este aeródromo en un helicóptero. Pero no se hizo nada de eso.
Entre las instituciones que fallaron en el cumplimiento de sus funciones figura el Ministerio de Exteriores polaco, que no controló el proceso de obtención de autorizaciones diplomáticas para los vuelos de aeronaves gubernamentales sobre el territorio de otros países. Tampoco supervisó las revisiones y reuniones de coordinación que debían realizarse antes de estos vuelos.
El Ministerio de Defensa, a su vez, no controlaba el proceso de adiestramiento de los pilotos de los aviones gubernamentales, ni el estado técnico de las aeronaves. La investigación reveló que el programa de adiestramiento de los pilotos fue redactado a principios de los setenta y ya era obsoleto.
Por su parte, los jefes de la Agencia de Seguridad del Gobierno no analizaron los potenciales peligros que corrían los dirigentes del Estado durante los viajes al extranjero, ni redactaron planes para garantizar su seguridad.
El informe será ahora analizado por los parlamentarios polacos.