Irán agranda su flota de petroleros ante las sanciones
Iran va a expandir su flota de petroleros con el envío de 12 supertanqueros chinos, preparándose así para afrontar las sanciones occidentales contra las exportaciones de su petroleo.
En el marco del contrato con China, por valor de 1.200 millones de dólares, la llegada del primer portador ultragrande, que fue construido para la naviera iraní encargada del envío de crudo NITC, se espera este mayo. Durante el año se suministrarán siete buques más y los cuatro restantes llegarán a finales de 2013.
Los nuevos buques, cada uno con una capacidad de carga de 2 millones de barriles de crudo, suman una capacidad muy necesaria por la flota de NITC en un momento en el que el número de empresas marítimas dispuestas a transportar crudo iraní disminuye en forma significativa ante las sanciones.
A partir de julio la UE prohibirá que aseguradoras y reaseguradoras europeas cubran a buques que llevan crudo iraní a cualquier parte del mundo, lo que amenaza con reducir los envíos y elevar los costos de los principales compradores, como China, la India, Japón y Corea del Sur.
Esta medida es una continuación de la presión que los aliados occidentales, incluidos la UE y EE. UU., ejercen sobre Irán para que abandone su programa nuclear, que, según ellos, encubre planes para dotarse de la bomba atómica.
Ante esta represión Teherán, que niega todo tipo de acusaciones, ha cortado con sus exportaciones petroleras a Alemania, Grecia y España y ahora tiene la mira puesta en Italia. "Tres años sin vender petróleo no afectarían a Irán", afirmó el presidente del país, Mahmud Ahmadineyad, defendiendo que su proyecto nuclear tiene fines civiles.