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Mariela Castro votaría por Obama
“Si fuera ciudadana estadounidense votaría a Obama para presidente", afirmó este miércoles la sexóloga Mariela Castro, hija del presidente cubano Raúl Castro, que visita el país para asistir a un Congreso de la Asociación de Estudios Latinoamericanos.
La sobrina de Fidel Castro aseguró que apoyaría al mandatario estadounidense, quien también tomó la decisión de prorrogar el embargo contra Cuba y ahora está a favor del matrimonio homosexual. A casi seis meses de las presidenciales en Estados Unidos, Obama finalmente dejó clara su posición respecto a los matrimonios de parejas del mismo sexo. En una entrevista con la cadena ABC News a inicios de mayo comentó que las parejas gay deben tener derecho a casarse, convirtiéndose así en el primer presidente en ejercicio en respaldar las uniones homosexuales.
“Creo que es algo en lo que realmente cree. Creo que es sincero y habla desde el corazón”, comentó Castro, dirigente del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) de Cuba y activista de la lucha contra la homofobia.
Además, insistió en que los electores estadounidenses deben presionar a sus autoridades para "eliminar el bloqueo económico y social" contra la isla caribeña, que el país impuso desde que Fidel Castro asumió el poder hace 50 años. "No es justo. No se puede permitir que un pequeño grupo de delincuentes continúen manipulando y haciendo difícil para EE. UU. y Cuba tener una relación. Tenemos muchas cosas en común. No dejen que nos separen”, añadió.
Criticó drásticamente a los inmigrantes cubanos que apoyan las restricciones económicas y de viajes a la isla. Los tachó de una "mafia cubana sin escrúpulos" e insistió que ellos tienen como rehenes a todo el pueblo estadounidense.
La presencia de Mariela Castro en EE. UU. provocó una fuerte oleada de críticas, no de ciertos grupos del exilio cubano, sino también del precandidato republicano a la presidencia, Mitt Romney. “Tenemos culturas y valores compartidos con América Latina. Tenemos oportunidades económicas extraordinarias que debemos aprovechar”, insistió Romney en su discurso ante la Coalición Latina que reúne empresarios de origen hispano. Sin embargo, el republicano excluyó de esta América Latina a Cuba y a Venezuela. Según él, Castro y Chávez “son un gran peligro para EE. UU. y para la gente en todo el mundo”.
“La administración de Obama no debe darle la bienvenida a la hija de un dictador. No debemos extender la mano a un régimen dedicado a la sistemática y flagrante privación de los derechos humanos”, insistió.
Desde el principio de su campaña electoral, Romney, el favorito de las primarias republicanas, no deja de lanzar críticas radicales contra los gobiernos de Cuba y Venezuela. Para él, están entre los regímenes “más despóticos y peligrosos del mundo". Varias de las decisiones de Hugo Chávez las ha calificado en su momento como "escandalosas y vergonzosas". En cuanto a Cuba ha declarado que: “Si soy presidente (…) usaré todos los recursos posibles para asegurarme de que cuando Fidel Castro muera tendremos la capacidad de ayudar al pueblo cubano a alcanzar la libertad”. Otra de sus controvertidas frases fue: “agilizaremos el día en que el régimen castrista llegue a su fin”.
“Creo que es algo en lo que realmente cree. Creo que es sincero y habla desde el corazón”, comentó Castro, dirigente del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) de Cuba y activista de la lucha contra la homofobia.
Además, insistió en que los electores estadounidenses deben presionar a sus autoridades para "eliminar el bloqueo económico y social" contra la isla caribeña, que el país impuso desde que Fidel Castro asumió el poder hace 50 años. "No es justo. No se puede permitir que un pequeño grupo de delincuentes continúen manipulando y haciendo difícil para EE. UU. y Cuba tener una relación. Tenemos muchas cosas en común. No dejen que nos separen”, añadió.
Criticó drásticamente a los inmigrantes cubanos que apoyan las restricciones económicas y de viajes a la isla. Los tachó de una "mafia cubana sin escrúpulos" e insistió que ellos tienen como rehenes a todo el pueblo estadounidense.
La presencia de Mariela Castro en EE. UU. provocó una fuerte oleada de críticas, no de ciertos grupos del exilio cubano, sino también del precandidato republicano a la presidencia, Mitt Romney. “Tenemos culturas y valores compartidos con América Latina. Tenemos oportunidades económicas extraordinarias que debemos aprovechar”, insistió Romney en su discurso ante la Coalición Latina que reúne empresarios de origen hispano. Sin embargo, el republicano excluyó de esta América Latina a Cuba y a Venezuela. Según él, Castro y Chávez “son un gran peligro para EE. UU. y para la gente en todo el mundo”.
“La administración de Obama no debe darle la bienvenida a la hija de un dictador. No debemos extender la mano a un régimen dedicado a la sistemática y flagrante privación de los derechos humanos”, insistió.
Desde el principio de su campaña electoral, Romney, el favorito de las primarias republicanas, no deja de lanzar críticas radicales contra los gobiernos de Cuba y Venezuela. Para él, están entre los regímenes “más despóticos y peligrosos del mundo". Varias de las decisiones de Hugo Chávez las ha calificado en su momento como "escandalosas y vergonzosas". En cuanto a Cuba ha declarado que: “Si soy presidente (…) usaré todos los recursos posibles para asegurarme de que cuando Fidel Castro muera tendremos la capacidad de ayudar al pueblo cubano a alcanzar la libertad”. Otra de sus controvertidas frases fue: “agilizaremos el día en que el régimen castrista llegue a su fin”.
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