Actualidad
El Congreso de EE. UU. arremete 'Rápido y Furioso' contra el fiscal general
El comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de EE. UU. aprobó una moción de censura contra el fiscal general del país, Eric Holder, por la operacion 'Rápido y Furioso', lo que podría llevarlo a la cárcel.
Holder indignó al comité negándose a facilitar documentos sobre el caso 'Rápido y Furioso', una operación fallida estadounidense, cuyo objetivo pasaba por atrapar delincuentes mexicanos vendiéndoles armas como cebo para seguir su pista, pero que acabó con más de 2.000 armas de fuego en sus manos.
Esta operación dejó al menos una víctima mortal, Brian Terry, un soldado norteamericano que fue abatido en la frontera de EE. UU. con México, precisamente con fusiles estadounidenses. El comité lleva ya mucho tiempo intentando identificar a los responsables por el fracaso de la operación, pero afronta una resistencia feroz.
Esta resistencia no sólo la ofrece Holder, sino que procede incluso de la propia Casa Blanca. De hecho, por primera vez durante su mandato, el presidente Obama usó el privilegio del Ejecutivo para impedir la entrega de documentos al Congreso.
Ahora el comité, con 23 votos a favor y 17 en contra, ha aprobado una moción de censura, que es el mayor instrumento de castigo del que goza el Congreso. En el caso de que sea confirmado por la Cámara de Representantes o el Senado, Holder podría afrontar una pena de cárcel de hasta un año.
Los demócratas aseguran que sus oponentes centran su atención en el caso 'Rápido y Furioso' por motivos políticos, para dañar la reputación del presidente Obama antes de las elecciones presidenciales, que ya se dibujan en el horizonte.
El jefe de comunicación de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer, comentó la situación en los siguientes términos: “los congresistas republicanos gastan su tiempo en una investigación políticamente motivada y pagada por los contribuyentes”.
La operación 'Rápido y Furioso' consistió en la venta de unas 2.000 armas de fuego a delincuentes mexicanos para luego seguir su pista por el país y detener a los implicados en el tráfico de armas. Sin embargo, los servicios de seguridad estadounidenses perdieron las huellas del arsenal, del que han sido recuperadas unas 600 unidades. El destino del resto se desconoce.
Esta operación dejó al menos una víctima mortal, Brian Terry, un soldado norteamericano que fue abatido en la frontera de EE. UU. con México, precisamente con fusiles estadounidenses. El comité lleva ya mucho tiempo intentando identificar a los responsables por el fracaso de la operación, pero afronta una resistencia feroz.
Esta resistencia no sólo la ofrece Holder, sino que procede incluso de la propia Casa Blanca. De hecho, por primera vez durante su mandato, el presidente Obama usó el privilegio del Ejecutivo para impedir la entrega de documentos al Congreso.
Ahora el comité, con 23 votos a favor y 17 en contra, ha aprobado una moción de censura, que es el mayor instrumento de castigo del que goza el Congreso. En el caso de que sea confirmado por la Cámara de Representantes o el Senado, Holder podría afrontar una pena de cárcel de hasta un año.
Los demócratas aseguran que sus oponentes centran su atención en el caso 'Rápido y Furioso' por motivos políticos, para dañar la reputación del presidente Obama antes de las elecciones presidenciales, que ya se dibujan en el horizonte.
El jefe de comunicación de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer, comentó la situación en los siguientes términos: “los congresistas republicanos gastan su tiempo en una investigación políticamente motivada y pagada por los contribuyentes”.
La operación 'Rápido y Furioso' consistió en la venta de unas 2.000 armas de fuego a delincuentes mexicanos para luego seguir su pista por el país y detener a los implicados en el tráfico de armas. Sin embargo, los servicios de seguridad estadounidenses perdieron las huellas del arsenal, del que han sido recuperadas unas 600 unidades. El destino del resto se desconoce.
comentarios