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Hacia el relevo de Ahmadineyad: la diplomacia iraní seguirá pendiente de EE.UU.
Irán ha publicado la lista final de ocho candidatos admitidos a las elecciones presidenciales. El politólogo Omar José Hassaan Fariñas considera que, al margen de quien salga elegido, la diplomacía iraní seguirá dependiendo de la política de EE.UU.
Otras nuevas amistades y relaciones van a depender no tanto del nuevo liderazgo que asuma la presidencia en Teherán, sino del progreso de la guerra diplomática y económica que mantiene EE.UU. contra Irán
Entre los ocho candidatos aprobados por el Consejo de Guardianes de la Revolución de Irán hay cinco conservadores cercanos al líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei. Entre ellos destaca Said Jalili, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional y principal negociador internacional del país en materia nuclear. Los otros cuatro candidatos conservadores son Mohamad Bagher Qalibaf, alcalde de Teherán; Gholam Ali Hadad Adel, parlamentario y ex presidente del Parlamento; Ali Akbar Velayati, asesor del líder supremo y exministro de Exteriores; y Mohsen Rezaei, ex comandante del Cuerpo de Guardianes de la Revolución y actual secretario del Consejo del Discernimiento.
En la lista también figuran tres candidatos que se presentan como independientes: Hasan Rohani y Mohamad Reza Aref, considerados como reformistas moderados y Mohamad Qarazi, que ha desempeñado cargos públicos con distintas administraciones y se considera como centrista.
Los países que tienen gobierno más progresista van a mantener una relación positiva con Irán sea quien sea el presidente del país
Las presidenciales en la república islámica se celebrarán el 14 de junio. El presidente actual, Mahmud Ahmadineyad, no puede concurrir a los comicios porque ya estuvo dos periodos en el cargo.
El politólogo Omar José Hassaan Fariñas considera que, sea quien sea el próximo presidente de Irán, las relaciones exteriores del país dependerán del desarrollo de la guerra diplomática y económica de EE.UU. contra la república islámica.
"Los países que tienen gobierno más progresista van a mantener una relación positiva con Irán sea quien sea el presidente del país", insiste el experto.
"Otras nuevas amistades y relaciones van a depender no tanto del nuevo liderazgo que asuma la presidencia en Teherán, sino del progreso de la guerra diplomática y económica que mantiene EE.UU. contra Irán. Si esta guerra se profundiza, va a perder más relaciones", afirma Omar José Hassaan Fariñas.
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