Se sabe que el 99% de los microorganismos no pueden crecer en los laboratorios, por eso los investigadores de la Universidad Northeastern en Boston (EE.UU.) usaron una placa electrónica para hacer crecer a los microbios en el suelo, logrando producir teixobactina.
Los científicos creen que la ciencia tendría que avanzar en el descubrimiento de este antibiótico, dado que desde el año 1987 ningún otro ha sido descubierto. La ausencia de nuevas medicinas predispuso a las bacterias a desarrollar resistencia a los preparados actuales, lo que dificultó el tratamiento de enfermedades, tales como tuberculosis, septicemia, SARM y colitispseudomembranosa. La teixobactina tiene una propiedad específica para combatir a estas bacterias superpatógenas.
"Muchos antibióticos son productos naturales fruto de los microbios, la mayoría de los cuales deriva del suelo", cita 'The Telegraph' al profesor Mark Woolhouse de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido).