Los expertos han estudiado todos los métodos, partiendo de la detención de las emisiones producidas por las fábricas y las centrales eléctricas, hasta la extracción del carbono del aire y adición de cal a los océanos. Ninguno de estos métodos resultó ser tan eficaz, como el de plantar más bosques, informa Bloomberg.
En el trascurso de las investigaciones se ha demostrado que la reforestación no es solo la manera más barata y eficiente para luchar contra el calentamiento global, sino la más beneficiosa. Sin embargo, existe otro método igual de eficaz: la incineración de restos de madera con el fin de convertirla en carbón vegetal y añadirlo al suelo.
Según el Panel Intergubernamental del Cambio Climático, la mayoría de los órganos directivos a través de todo el mundo deben prestar más atención a estas tecnologías,en vez de tratar de detener las emisiones. Argumentan que dichos métodos requieren menos gastos para su realización y, según los cálculos, para el año 2050 podrían purificar el planeta de un total de CO2 equivalente a las cantidades producidas cada 2,5 años.