Ubicado a unos 35.000 kilómetros sobre la Tierra, el satélite Himawari-8, que está gestionado por la Agencia Meteorológica de Japón, ha capturado en imágenes la increíble belleza de nuestro planeta, pero también la brutal fuerza de las tormentas tropicales que contiene la atmósfera, informa el portal 'Daily Mail'.
Equipado con cámaras de alta definición e infrarrojos, el Himawari-8 es capaz de seguir el movimiento de las nubes y las tormentas en su paso a través del océano Pacífico.
Una de las imágenes más impresionantes fue el movimiento de los tifones Atsani y Goni, que en agosto pasado alcanzaron la categoría 5, tormentas en las que los meteorólogos fueron capaces de observar sus vórtices gracias al satélite nipón.