Guatemala sigue siendo azotada por desastres naturales
La República de Guatemala sigue sufriendo desastres naturales. Las autoridades del país se han visto obligadas a ampliar el estado de emergencia decretado hace días, esta vez declarado a nivel nacional.
Todavía no ha cesado su violenta arremetida el volcán Pacaya, que empezó con la actividad eruptiva el 27 de mayo y dejó un saldo de 2 muertos, 3 desaparecidos y unas 2.000 personas desplazadas. A pesar de que redujo sus explosiones, sigue lanzando lava y arena y presenta peligro para la población.
La situación se agravó con la tormenta Agatha. Las intensas lluvias causan el desbordamiento de ríos, inundaciones y flujos de lodo. La primera tormenta tropical de esta temporada de huracanes del Pacífico ya dejó un saldo de 12 muertos y decenas de desaparecidos, según informa BBC Mundo.
Los departamentos de San Marcos, Quiché, Chimaltenango y Quetzaltenango resultaron ser los más damnificados: el caudal de los ríos subió muy drásticamente, las abundantes aguas afectaron a más de 500 viviendas, y destrozaron puentes y carreteras.
Se han movilizado unidades del Ejército y de la Policía para contribuir a las labores del rescate. Los habitantes de la zona siguen siendo evacuados.
Los expertos comentan que los daños causados por las inundaciones van a ser más graves que los anteriores, ya que la ceniza dejada por la erupción del volcán Pacaya bloquea los sistemas de drenaje y no permite que baje el nivel de agua.
Además, las lluvias intensas obstaculizan los trabajos de limpieza de las calles y casas en la capital y sus alrededores, mientras que el aeropuerto internacional, La Aurora, permanece cerrado.
Se pronostica que Agatha afectará también a El Salvador y el sur de México.