Una carta de la estudiante Dorofeya Sysóyeva:
Hola. Me llamo Dorofeya, tengo 9 años. Estoy en el tercer grado en la escuela 1527. También practico la música, me gusta ir a recoger champiñones, ir al mar, juegos divertidos, animación, pues todo que les gusta a los niños.
Me gustaría saber cómo es la Luna y la Tierra desde el espacio. ¿Me podría mandar las fotos desde el espacio? También me gustaría tener un tubo de comida espacial o, mejor, dos. También me interesa cómo duermen y cuántas horas? ¿Ha estado en la Luna, ha visto al Marte?¿Hay alguna vida por allí o no? Me dijeron que pasa varios meses en el espacio. ¿No echa de menos a su planeta natal? ¿No tiene miedo de no poder regresar? Tengo muchas otras preguntas ))) ¿Cómo es su nave?¿Cuántos años tiene? ¿Cuántas veces ha estado en el espacio en el escafandro? ¿Qué hace por ahí todos los días? Me dijeron que Ud. trabaja, pero qué tipo de trabajo es el suyo? ¿Se ven más cerca los planetas y estrellas? ¿Cree que todo eso no existía antes? ¿Qué le gusta hacer allí? ¿Cómo se mueve por la nave? Me gustaría probarlo, pero tengo miedo. ¿Cómo se tranquiliza en esa nave? ¿Cómo cocinan aquí o lo tienen todo preparado en los tubos? A mí me gusta inventar perfumes y champús…
Pues me alegro de poder escribirle una carta y me alegraré de recibir una respuesta. Me agradaría que Ud. venga a nuestro colegio y nos cuente sobre su trabajo.
Feya.
Fiódor Yurchijin:
¡Hola Dorofeya!
Hace tiempo que recibí tu carta, pero no he tenido tiempo para contestar, y no sólo porque tengo mucho trabajo, sino también porque tu carta es muy interesante con muchas preguntas excelentes. Me gustaría contestar de una manera interesante también. Además, tienes 9 años, la misma edad que mi hija, Lena, y eres tan curiosa como ella. Pues, voy a empezar y vamos a ver qué sale. Intentaré contestar tus preguntas en el orden en el que tú las hiciste.
Como tú, yo fui al colegio. Me gustaba la animación, juegos divertidos. Y el mar estaba cerca. También tenía sueños. Soñaba con el espacio, porque Yuri Gagarin era y todavía es mi héroe, el primer cosmonauta del planeta. Fue el primer afortunado en ver qué bella es. Estoy totalmente de acuerdo. Me gustaría que cada habitante del planeta lo viera al menos una vez desde el espacio. Que viera las salidas y puestas del sol, las auroras boreales, las nubes, las tormentas eléctricas. Se puede ver en una ojeada a media Europa. Ves a Italia y en seguida a Grecia. Al cabo de un minuto tenemos a África por debajo. Las pirámides, el Nilo, el Mar Rojo. Más allá esta el Océano Indio. Ha pasado por un lado Australia y ya estamos por encima del Pacífico. Aquí vemos a América, el Atlántico y Europa otra vez. Sólo han pasado una hora y media. El día en el órbita ha cambiado por la noche. Y otra vez viene el día. El mismo territorio parece completamente distinto a diferentes horas del día. Pero este territorio no es un campo o un banco del río, sino los espacios vastos de nuestro planeta. Un espectáculo magnífico. Y por ahí está la Luna. Se levanta muy rápido por encima del horizonte y se baja también muy rápido. Hay que tomar las fotos ya que mucha gente -y tú también- estáis interesados en cómo es la Tierra desde el espacio. Por eso te mando muchas fotos diferentes, y lo veas tú misma. Pero yo creo que es maravillosa. Y no me gusta creer que todo eso no existía. ¡Hay que hacer todo lo posible para preservar esta belleza!
No he estado en la Luna. Sólo estuvieron allí los astronautas norteamericanos hace muchos años en la nave espacial Apolo. Pero sí que he visto Marte, Venus, Júpiter e incluso tomé fotos. Pero en las fotos están un poco más grandes que las estrellas. Y ni siquiera los científicos saben si hay vida en aquellos planetas. Sólo lo discuten. Un día la humanidad seguramente volverá a volar a la Luna y a otros planetas. Nosotros por ahora estamos volando en la Estación Espacial Internacional.
Yo estoy aquí por tercera vez. También hice caminatas espaciales. Espero volver a hacer una caminata muy pronto. Por supuesto echo de menos a mis familiares y amigos. Y el bosque. Porque a mí también me gusta recoger los champiñones. Pero no lo pude hacer este año por el trabajo en la estación espacial. Es muy interesante y responsable. Y muy variado. Lo que más nos gusta a nosotros es realizar experimentos. Porque los adultos son tan curiosos como tú. Y también les gusta hacer preguntas. Y lo más importante es encontrar las respuestas. ¿Pueden vivir en ingravidez los insectos y florecer las plantas? ¿Cómo se comporta el agua y otros líquidos? Hay muchísimas preguntas a las que contestan los experimentos científicos. Espero verte pronto a ti y a tus amigos en tu colegio cuando regrese a la Tierra. Seguro que regresaremos, que nos esperan en casa. Y no tenemos miedo. Les trataré de contar con más detalle sobre todo. Y de nuestro día de trabajo también. Es parecido al de la Tierra. Dormimos como en la Tierra -a veces 5-6 horas, a veces 7-8. A mí me gusta dormir mucho el fin de semana.
Y les trataré de traer comida espacial. La probaremos seguramente. Tú verás que no está en tubos, sino en latas y paquetes. Se lo puede calentar y añadir agua. También es muy rica y nutritiva. Quiero pedirte que cuando seas mayor, que inventes perfume para las mujeres cosmonautas. El perfume debe tener un aroma muy delicado, no irritante. Aunque la estación es grande, todos olores se sienten aquí muy intensamente. De modo que tu tarea no es fácil. Y el champú. Aunque ya tenemos un champú. ¿Sabes cómo se llama? 'Aelita'. Pregunta a los adultos, porqué y escríbeme. Y manda, por favor, tu foto. Espero haber contestado a todas tus preguntas. Espero tu respuesta.
Atentamente,
Fiódor Yurchijin
Vía www.roscosmos.ru