La Estación Espacial Internacional no tiene tradiciones arraigadas. No sólo cada nueva tripulación, sino también cada cosmonauta o astronauta aporta algo suyo. Los astronautas vienen de varios países, además son de distintas profesiones y con distintas experiencias de vida y hábitos. En la EEI todo ello se mezcla, creando un peculiar e inconfundible ambiente. Algunos hábitos se asimilan, otros se van junto con las tripulaciones que los hayan traído.
La noche del martes, un día antes del aterrizaje de la nave Soyuz TMA-M, en la EEI tuvo lugar una ceremonia oficial de cambio de mando del comandante de la EEI-26 al comandante de EEI-27, o sea, de un capitán de navío estadounidense a un coronel de la Fuerza Aérea rusa.
Resultó que los rituales militares tanto en EE. UU. como en Rusia tienen mucho en común. Por ello el cambio de mando fue efectuado en forma de una ceremonia militar con las obligatorias frases en ruso y en inglés: “¡Mando de la EEI entregado!” y “¡Asumido el mando de la EEI!”. Esta vieja tradición militar es capaz de dar inicio a una nueva tradición en la EEI.
Ha comenzado una nueva etapa de vuelo de la estación: la misión N.° 27 de la tripulación de la Estación Espacial Internacional.
En la foto: la tripulación después del cambio de mando.
Dmitri Kondrátiev.
15 de marzo de 2011, EEI.
Material facilitado por la Agencia Espacial Federal Rusa, Roscosmos.