La milicia kurda resiste. Turquía chantajea. OTAN mira hacia otro lado. La Coalición bombardea objetivos sin terroristas. UE se declara “preocupada”. ONU llama a cesar los combates. En síntesis, valentía y cobardía enfrentadas.
Lo cierto es que se sabe claramente que el Estado Islámico rodea la ciudad por tres frentes, avalada por un ejército bien aprovisionado técnicamente y conociendo que posiblemente nadie irá en ayuda de su presa. Así, el desenlace parece evidente. Sin embargo, no todo es tan obvio cuando el espíritu de patria penetra en los corazones.
Lo que se conoce es que los "promotores de la libertad" en el mundo son simplemente retóricos, o sea, que manifiestan una idea cuando en efecto lo que desean es otro suceso. Así, Erdogan, expone un gran descubrimiento a través del discurso público entregado a las cadenas de información: si nadie ayuda a los milicianos de Kobani… esta caerá. Por ello, él apoyará a éstos no ciudadanos si se comprometen a eliminar a Bashar al Assad. En caso contrario, la muerte les espera. El asesinato de veinte kurdos en el país, que protestan por la posición ”neutral” que ha adoptado, demuestra con quién está trabajando.
La OTAN se ha planteado "apolítica" en todos los casos concretos que tienen que ver con genocidios. Por este mecanismo, no hicieron declaración condenando las masacres de Gaza y, ahora, considera que es un problema que no les concierne pues están interesados en la paz mundial y en cuidar a sus socios de ataques mayores. De esta manera, mientras masacran a los kurdos, esta organización desplaza aviones y genera bases de mayor envergadura en Europa del Este para controlar al “enemigo”.
La Unión Europea, a través de la canciller Angela Merkel, ha manifestado su "preocupación" por lo que está ocurriendo y, sintiendo en su alma dicho pesar, está pensando en ver como colabora con los refugiados pues están en peligro de muerte, por sobre los que se encuentran sitiados defendiendo la vida de un número importante de familias. De igual modo, será cooperante en la medida que se solicite.
La Coalición considera la situación aterradora por lo cual ha continuado sus ataques "precisos y contundentes", según la prensa tradicional, sin hacer notar los triunfos pues no los ha tenido hasta ahora, aunque gracias a ellos es que aun supuestamente no cae Kobani. Si los defensores de la sitiada ciudad llegan a triunfar sobre el ISIS, seguramente a nivel mundial se les atribuirá la victoria a los aéreos y triunfantes pilotos. En realidad, se sabe con certeza que antes de cada bombardeo las fuerzas del islam extremo abandonan sus posiciones y, luego de realizados, regresan a ellas en un juego táctico simple: recibo el aviso, salvo la vida, luego coopero cuando se requiera.
El peligroso “plan de amortiguamiento”
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, ha propuesto un plan ya analizado desde hace bastante tiempo entre las agencias de inteligencia implicadas en la creación del Estado Islámico, con el fin de lograr tres objetivos: mantener a ISIS en el norte de Irak y Siria durante un tiempo "prudencial", preparar un territorio desde donde desarrollar un proyecto disuasivo hacia Irán, Irak, Siria, Líbano, Egipto si fuese necesario, y otros, junto a un tercer propósito que es exterminar a los enemigos de Occidente, iniciando con Bashar al Assad.
La idea es consolidar un territorio sirio en forma de colchón seguro que sea administrado por Turquía y vigilado por la Otán, de tal modo que sirva como campo de entrenamiento y desarrollo de bases militares. Es implementar de modo ilegal una zona de exclusión aérea más una porción terrestre en el norte de Siria, lo que se está viendo claramente con los ataques de la Coalición que destruyen la riqueza petrolífera y de gas. Al ser un territorio "neutral" permitiría adiestrar y mantener a un grupo de combatientes de Ejército Libre, preparados para la invasión y con una puerta de escape en caso de ser atacados o posiblemente exterminados: se constituye este espacio es una zona no permitida de "violación" por un Estado soberano en su propia nación. La casa Roja ya ha informado que cualquier agresión a un avión estadounidense sería una declaración de guerra y tendría la respuesta adecuada.
Tal como lo ha manifestado con gran claridad Manlio Dinucci, el general Martin Dempsey, jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense, declaró estar dispuesto a considerar el pedido del presidente Erdogan, agregando que ello exigiría "ataques aéreos para neutralizar el sistema de defensa aérea del Gobierno sirio". Cabe señalar que en Adana y Hatay, fronterizas con Siria, según Dinucci: "La CIA ha creado varios centros de entrenamiento para los combatientes destinados a infiltrarse en Siria. Y es en esos centros donde han recibido entrenamiento los miembros de diferentes grupos islamistas –inicialmente clasificados por Washington como terroristas– provenientes de Afganistán, Bosnia, Chechenia y Libia, entre otros países. Las armas llegan principalmente a través de Arabia Saudita y Catar y el puesto de mando que dirige las operaciones está a bordo de navíos de la OTAN basados en el puerto [turco] de Iskenderun (Alejandreta).Desde ese puesto de mando se prepara la aplicación del "plan Erdogan"".
Coincidente con ello, Ahmet Davutoglu, primer ministro de Turquía, insistió en que se establezca una zona de exclusión aérea en Siria, lo que requeriría que se ataque las defensas antiaéreas de este Ejército para prevenir una respuesta con peligro.
Ratificando dicha posición, la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, ha asegurado este miércoles que evitar que la ciudad siria de Kobani caiga en manos de los terroristas del grupo takfirí EIIL, no es una prioridad para Washington. Pese a lo "horrible", el objetivo estratégico es Siria y el derrocamiento de su presidente legítimo. En ese sentido, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, ha afirmado este miércoles que con Reino Unido estudiarán esta "zona de amortiguación", concordando con el Pentágono cuyo portavoz, John Kirby, ha asegurado que Estados Unidos tendrá una presencia militar en Oriente Medio durante "muchos años" debido a los largos conflictos "generacionales" que soporta la región, suponiendo que unos 30 años mínimo durará el conflicto con Daesh.
Consideraciones preocupantes.
El plan geoestratégico ha continuado, ahora con una nueva estratagema. Aunque hay oposición y claridad en varios espacios del mundo democrático.
La entrada de tropas turcas a Bodani es considerada una re ocupación por los milicianos kurdos, especialmente al haberse negado a dejar ingresar armas y militantes que procedían de ese país para apoyarlos, siendo detenidos en la frontera. Y, así mismo, toda acción o medida debe basarse en el derecho internacional y con la venia de la nación donde se realice ésta, tal como lo ha planteado Rusia.
Tal vez lo que se desea es una nueva franja de Gaza, custodiada por gendarmes quienes no permitirán salirse de los límites a quienes vivan allí, "protegiéndolos" del exterminio del Estado Islámico, es decir, una nueva cárcel abierta e inmensa. Lo cierto es que continuará la agenda oculta para invadir a Siria, para lo cual ya se abren estas nuevas "ideas" como la de crear una zona de amortiguación, lo que significa quitar territorio al país y dividirlo para emplazar allí los 5000 terroristas "moderados" que Arabia Saudita ya entrena rápidamente.
Se conoce que se continuará reprimiendo a sangre y fuego las protestas en Turquía, que exigen una posición de defensa de los ciudadanos y de Kobani. Afortunadamente junto a la resistencia enorme de la militancia kurda, la Cancillería de la República Islámica de Irán ha mostrado su disponibilidad a adoptar medidas prácticas para resolver la crisis que sufre la ciudad, siempre y cuando reciba una solicitud oficial del Gobierno de Damasco con el fin de respetar la inviolabilidad soberana.
No se puede olvidar que el pasado 16 de septiembre el EIIL comenzó el ataque contra la ciudad fronteriza siria de Ain al-Arab (Kobani) , y que posteriormente Rooz Bahjat, oficial de la inteligencia kurda, advertía que los terroristas podrían tomarla pronto y desencadenar una masacre, temiendo por la muerte de miles de familias. Al referirse al hecho de que los tafkiríes están armados con tanques y lanzacohetes, planteó la ayuda tecnológica que Occidente y países árabes les han prestado, siendo responsables del genocidio por venir.
Kobani es la ciudad simbólica de valentía ante el terrorismo. Apoyarlos es comprometerse contra el Estado Islámico, defender la vida de miles ante riesgo de exterminio y cimentar un punto geopolítico para no desintegrar Irak y Siria. Parece ser que la "compasión" occidental es simplemente un conjunto de palabras vacías para llenar las conciencias de información falsa. Por dicha razón, sigue vigente el compromiso con la paz mundial por parte de los colectivos internacionales que sigan considerando a todo ser humano, independiente de su credo o raza, una persona cuya vida debe ser respetada como criterio de justicia integral. Prever los peligros de tácticas destructoras de la Humanidad es de imprescindible urgencia.
Quizás la ingenua afirmación de Mustafá Ebdi, originario de Kobani, respecto a los recientes bombardeos de la Coalición en la zona de Mishtenur, al sur de Kobani, llame a reflexión profunda: "Pero el EI no se halla allí. Tendrían que estar bombardeando otros lugares".