Serguéi Vólkov contesta a las preguntas de los lectores

Antón Sinitsyn, estudiante de primara:

¿Qué es aquello que echa más de menos mientras está en el espacio? Exceptuando a sus personas cercanas, claro.

Serguéi Vólkov:

Por supuesto que durante el vuelo los cosmonautas echan de menos a sus familiares y a las personas cercanas. Pero yo creo que casi todos echamos de menos la sensación de ducharnos o darnos un baño, en el que el agua se deslice por el cuerpo. Aquí, puedes cubrirte con el agua, pero se queda en la piel, como si fuera un gel. La puedes quitar con las manos o secarte con una toalla, pero el agua no desaparece por sí misma. Nos lavamos con servilletas mojadas y toallas.

Iván Mijailenko:

¿Cómo viven los cosmonautas la posibilidad de una colisión con meteoritos?

Serguéi Vólkov:

El espacio en torno a la estación se vigila constantemente. Si existe la posibilidad de un acercamiento peligroso a meteoritos o sus fragmentos, nos avisan. Como regla general, en estos casos se realiza una maniobra para esquivarlos. La última vez que lo hicimos fue el 29 de septiembre. Todo se desarrolló sin complicaciones, no interrumpimos nuestro día laboral y nos quedamos cada uno en nuestro segmento. En junio unos fragmentos de meteoritos pasaron muy cerca de nosotros, recibimos la orden de cerrar escotillas de traspaso y retirarnos a nuestras naves. El fragmento pasó a una distancia de cien metros de la batería solar.

Viacheslav Dyshliuk:

Buenas tardes, Serguéi. He notado que en la parte rusa de la EEI hay muchos tubos de ventilación. ¿Qué objetivo concreto tienen? ¿Obstaculizan esos tubos el movimiento, sobre todo al pasar por las esclusas? También me ha parecido que la circulación del aire a través de esos tubos debe de ser ruidosa, por eso es me gustaría saber si eso no les molesta al intentar dormir o descansar. ¡Gracias!

Serguéi Vólkov:

Efectivamente hay muchos tubos de ventilación. Con su ayuda se realiza el intercambio del aire entre los módulos. El aire se purifica del gas carbónico y de otros elementos dañinos y luego se extiende por toda la estación a través de esos tubos. Molestan al moverse por la estación solamente durante los primeros días de vida en la EEI, hasta que aprendes a volar, y luego casi ni los notas. Es verdad que hay mucho ruido, pero no es por esos tubos, sino por los ventiladores que hacen circular el aire a través de ellos y que enfrían los aparatos. Con el tiempo uno se acostumbra a eso y ya puedes distinguir otros sonidos. Mientras dormimos usamos tapones para los oídos y auriculares que sirven para reducir las molestias por los ruidos.

6 de octubre del 2011, EEI.

Material facilitado por la Agencia Espacial Federal Rusa, Roscosmos