(Primera parte – La Guerra)
En lo que concierne a la literatura militar, como bibliografía destacada para la formación en este ámbito, sin duda podemos ver como una gran referente al general prusiano Karl Von Clausewitz.
Carl Von Clausewitz
Tropas de Napoleón invade Rusia (1812)
Este historiador especializado en temas bélicos ha volcado su experiencia desde el campo de batalla a la redacción de material de lectura que, en algunos libros que componen la obra: 'De la Guerra', aborda pasajes que refieren a los aspectos generales del ejército y del soldado en lo individual.
En esta primera entrega de 'Reflexiones desde el Campo de Batalla' vamos a tomar proximidad con los conceptos referidos por Von Clausewitz sobre la guerra, para profundizar el debate de las 'Tres razones para el equilibrio, tres razones para creer', como es la filosofía de este Blog, y detectar coincidencias entre los antecedentes del pasado y los interrogantes del presente.
En la realidad global del 2010
Probablemente el lector habrá escuchado el concepto: “La guerra no es simplemente un acto político, sino un verdadero instrumento político, una continuación de las relaciones políticas, una gestión de las mismas con otros medios”, que son conclusiones que datan del siglo XVII y ofrecen numerosos casos donde cabe la comparativa. Ciertos emprendimientos bélicos del presente son cargados de desconfianza sobre razones naturales de sus objetivos, que encuentran respuesta en el análisis de la teoría de la guerra desde las palabras de Von Clausewitz.
En línea con: “La guerra no es sino la continuación de las transacciones políticas, llevando consigo la mezcla de otros medios. Decimos la mezcla de otros medios, para indicar que el comercio político no termina por la intervención de la guerra”. Es discutible pensar que el nuevo orden global necesite de un equilibrio real de fuerzas (teoría multipolar) para que no se sucedan hechos avasalladores o atropellos que se ajustan con reflexiones que Von Clausewitz, pero el camino de preservar la paz no puede dejar que en la arena política mundial se ensaye el concepto de: mayor poderío bélico al servicio de intereses del comercio. Y este equilibrio tiene que provenir desde la jurisprudencia como el apego absoluto a la ley, y el principio del multilateralismo que sería el punto de la armonía en las fuerzas de poder militar.
Las definiciones del autor sobre la guerra provienen de las épocas donde no existían los misiles interceptores, ni tantos elementos de información que podían evitar invasiones en la búsqueda de armas masivas que luego no eran tales. Se anticipaba: “La guerra es un acto de violencia que intenta obligar al enemigo a someterse a nuestra voluntad”, se trata realmente “predicciones del pasado” pero vigentes en un escenario que tiene hoy abundancia de declaraciones belicosas, por ejemplo las que alarmantemente giran en torno a la relación con Irán. El pasado nos muestra que debemos ser más responsables, pero con casos no tan lejanos a los tiempos de Clausewitz.
Identificar consignas para unificar perspectivas
La dispersión de teorías, cientos de expertos que proponen diversos diagnósticos, aires de poca transparencia y la falta de unidad de criterios son factores que inciden al definir temas globales en materia de seguridad y defensa en medio de grandes intereses en juego. Parece no existir un consenso común que llegue a ser parte de la agenda pública y tome presencia en la comunidad internacional. Hay ausencia de concordancia en la voz de los líderes de las naciones del mundo para encontrar la tan preciada estabilidad. La paz es deseada por todos, pero en hallar el camino se potencian divergencias y hay dudas sembradas si esas divergencias son teorías para la gestión de la seguridad o sostén de intereses económicos.
Por ello, trasladarnos a las definiciones universales sobre las teorías de la guerra es una buena fuente de inspiración para el ejercicio de hallar una perspectiva que logre múltiples adhesiones y en la que muchas voluntades puedan coincidir.
Sin apego a las reglas, es la 'ley del mas fuerte'
Una consigna sobre la cual hay que aunar esfuerzos se trataría por aspirar que prevalezca el 'El Derecho Internacional' por sobre 'La Ley del Más Fuerte'. Es simple, hacer valer la 'Jurisprudencia Internacional' es proporcional a brindar una mejor convivencia entre las naciones del mundo bajo el establecimiento de reglas que todos deban cumplir. Todos lo entendemos, todos lo aceptamos, pero hay síntomas de que algo no funciona y allí debe estar la vía multilateral para contribuir con equidad.
La evolución del hombre ha sido notable a multinivel, pero en la agenda global de la seguridad y la defensa, la búsqueda de un status óptimo de convivencia tiene una correlación con el pasado que muestra la incapacidad para haber logrado avances que se diferencien con los tiempos de Von Clausewitz.
El compromiso o el azar
Una expresión final del general prusiano Carl Von Clausewitz refiere al azar: “ninguna actividad humana guarda relación más universal y constante con el azar como la guerra. El azar, justamente con lo accidental y la buena suerte, desempeña un gran papel en la guerra”. Se trata de conceptos que se ajustaban a los modelos de combates de la época.
En los Objetivos del Milenio la comunidad internacional comprometida en el marco de las Naciones Unidas, tiene como metas para el 2015 enterrar la violencia; pero la militarización en muchos puntos del planeta parece preparar el escenario para las posibles guerras.
Ante la lógica que existe en estas citas trasladadas a lo contemporáneo, emergen argumentos pesimistas al saber que hay una estructura global en el marco de las Naciones Unidas para establecer la paz en el mundo, pero paralelamente hay emprendimientos unilaterales que son una muestra de la “búsqueda de fines políticos por medio del uso de la fuerza”.
En el pasado el “azar” ocupaba un protagonismo por las decenas de variables imposibles de manejarlas con previsión en la actividad bélica. En el presente, la “inestabilidad” en algunos puntos del planeta choca frente a una globalizada política de prevención que predomina en materia de seguridad y se trata de la obtención de previsibilidad frente a las amenazas.
Por ello es de convicción positiva y optimista, saber que cada ciudadano debe seguir tomando contacto con la agenda política internacional para saber de actuar y oponerse a que en el mapa geopolítico de la seguridad global no transite por la cornisa del azar y para ello está la vía institucional, ya que como interpreta Von Clausewitz, el azar juega un gran papel en la guerra.
Soldado Guerra Irak (2003)
Citas de Autor: Carl Von Clausewitz, Obra 'De la Guerra' publicado en 1832.