¡Cuidado con la "demagogia"!

Escucha bien, señor Vargas Llosa, así como celebramos tu crítica hacia el régimen en 1990, hoy repudiamos tu entreguismo al poder y el dinero.

Se equivoca usted, señor Mario Vargas Llosa. El hecho de que escriba libros bonitos no le da derecho a esparcir mentiras y propagar ignorancia.

¡Cuidado con el "populismo", la "demagogia" y las "recetas fracasadas"!, dice usted.

¿Se refiere, acaso, a las promesas huecas que cada sexenio nos hacen en México de que ahora sí habrá desarrollo, bienestar y paz?

¿Tendrás en mente las constantes mentiras de Carlos Salinas, de Ernesto Zedillo, de Vicente Fox, de Felipe Calderón y de Enrique Peña Nieto?

Esos son los "demagogos" que repiten una y otra vez las mismas "recetas fracasadas" del neoliberalismo trasnochado que ha generado una de las crisis de corrupción, impunidad, censura y violencia más grandes de la historia de México.

El diccionario de la Real Academia Española, sí, de esa realeza española que tanto admiras y que tanto te apapacha ahí en Madrid, define "demagogia" de la siguiente manera:

"Degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder".

No hay mejor descripción del sistema hoy en México. Hoy sufrimos bajo un presidente y un régimen autoritario que se aferran al poder precisamente mediante la manipulación mediática de los sentimientos más elementales de la ciudadanía, pero combinada también con una brutal represión y censura gubernamentales. Y un entreguismo absoluto a Donald Trump.

Poco ha cambiado en México desde que usted, hace casi tres décadas, ser refirió a la "dictadura perfecta". Quienes hoy nos malgobiernan son, literalmente, los hijos políticos del Salinato.

El pueblo mexicano, sin embargo, ya está harto de tanta tranza y se prepara para una nueva época de libertad, de participación, de democracia y de desarrollo.

Escucha bien, señor Vargas Llosa, así como celebramos tu crítica hacia el régimen en 1990, hoy repudiamos tu entreguismo al poder y el dinero.