La conversación entre Rafael Correa y el exsecretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) José Miguel Insulza comienza con un importante detalle, destacado por el exmandatario ecuatoriano: Insulza fue el primer secretario de la historia de la ente hemisférico nombrado sin el apoyo de EE.UU., en un momento (el año 2005) en que había suficientes gobiernos progresistas en la región para sostener su candidatura.
Tras esta presentación, Correa lanza una pregunta directa a su invitado, parafraseando una afirmación de el excanciller cubano Raúl Roa: "¿Es la OEA realmente el 'Ministerio de las colonias yanquis'?"
"En el algún momento lo fue", admite Insulza, subrayando que "ciertamente, durante todos los años 60, eso fue ocurriendo con mucha fuerza".
No obstante, el abogado chileno defiende los aportes importantes que la organización hizo en algún momento de su historia, sobre todo en materia de elecciones y Derechos Humanos.
La conversación hace un repaso histórico de las distintas fórmulas institucionales ensayadas en América Latina para lograr cohesión entre los diversos países, de cara a una defensa conjunta de los intereses de la zona. El recorrido lleva a Correa a un diagnóstico concreto: "Uno de los grandes problemas para el desarrollo [de la región] es nuestra incapacidad para organizarnos".
"Necesitamos una organización latinoamericana", agrega Insulza por su parte. "Ojalá que de todo lo que nos ha pasado ahora sacáramos esa lección para más adelante: que tenemos que ser capaces de construir organizaciones propias", insiste, haciendo alusión a que la pertenencia a la OEA, entidad en la que EE.UU. tiene un peso determinante, no responde puramente a los intereses propios de América Latina.
Correa ensaya una mirada crítica a las posturas de la OEA en algunos los más recientes acontecimientos políticos de la región. En concreto, señala que "al inicio del 2019 reconoce el gobierno de Juan Guaidó", y que "en octubre del mismo año, promueve el Golpe de Estado en Bolivia".
"Frente a esa OEA, ¿qué podemos hacer?" -inquiere Correa–, denunciando que la institución "es cómplice de rompimiento democrático". Insulza explica entonces una condición "fundamental" de la actual OEA: "el problema de que le ha tocado la Administración Trump".
Por lo demás, el exsecretario afirma que, aunque "ya nadie en el mundo piensa que Juan Guaidó sea de alguna manera presidente de Venezuela", el líder opositor "sigue teniendo representantes", ya que, de hecho, "el asiento de Venezuela en la OEA está ocupado por una persona vinculada a Guaidó", algo que a su juicio "daña a la institución".
Correa también saca a colación el hecho de que la OEA "brilló por su ausencia" en el proceso jurídico que anuló políticamente a Lula da Silva en Brasil, a lo que Insulza responde: "Nunca ha sido bueno judicializar la política, o sea, tratar de resolver los problemas políticos en los tribunales de justicia y no en las elecciones. Pero politizar la justicia es más grave todavía".
En la conversación también se aborda el derrocamiento de Evo Morales en Bolivia, a la que Insulza se referirá sin ambages como "un golpe de Estado".
Para conocer en toda su amplitud el análisis histórico y geopolítico que llevan a cabo Correa y su invitado en esta tertulia, les emplazamos a que vean completo el video que les ofrecemos.
