Sociedad
Los contenedores de carga se convierten en el hogar de muchas personas en Reino Unido
¿Cómo permitirse arrendar una vivienda si los precios del alquiler están por las nubes? En el Reino Unido han encontrado una salida al problema: vivir en contenedores de carga.
Parece que varios ciudadanos de Londres han encontrado en los contenedores de carga una alternativa de vivienda asequible ante los altos precios de los alquileres. El espacio es mínimo y el interior es austero, sin ningún lujo, pero lo más importante es que esta variante es barata, un factor fundamental a la hora de buscar casa. El precio es el principal obstáculo para muchos de los que desean encontrar un hogar o independizarse.
"Es difícil actualmente para la gente conseguir un alojamiento confortable, a buen precio, sin tener que pagar enormes sumas por el alquiler", señala Louise Stephenson, ex residente de la Asociación Cristiana de Jóvenes.
Por ese motivo una organización benéfica del Reino Unido ha lanzado este proyecto de vivienda, inspirado en la estructura de algunos pueblos africanos. La iniciativa, que tiene cada vez más seguidores, goza de la aprobación de las autoridades y está a la espera de alguna fuente de financiación. De necesidades y posibilidades saben mucho los jóvenes. En su gran mayoría los miembros de este colectivo buscan independizarse sin hipotecar sus vidas debido a la precariedad laboral y a la falta de recursos.
"La sociedad les hace perder los estribos, porque en el momento en el que tratan de encontrar su lugar y empiezan a trabajar no pueden permitirse el lujo de pagar por un albergue ni ningún otro tipo de alojamiento", asegura Timothy Pain, exdirector ejecutivo de la Asociación Cristiana.
A priori, la idea de vivir en un contenedor puede sonar disparatada, pero si se tiene en cuenta que el Gobierno británico planea edificar tres millones de nuevas viviendas para el 2020 sin ninguna medida concreta para los jóvenes ni las personas con pocos recursos, lo que parece un disparate se convierte en una posibilidad muy real a tener en cuenta. Y es que cuando alguien desea tener su propio hogar también quiere sobrevivir y llegar a fin de mes, y no terminar en la calle desahuciado por culpa de una hipoteca o un alquiler que es incapaz de pagar.
"Es difícil actualmente para la gente conseguir un alojamiento confortable, a buen precio, sin tener que pagar enormes sumas por el alquiler", señala Louise Stephenson, ex residente de la Asociación Cristiana de Jóvenes.
Por ese motivo una organización benéfica del Reino Unido ha lanzado este proyecto de vivienda, inspirado en la estructura de algunos pueblos africanos. La iniciativa, que tiene cada vez más seguidores, goza de la aprobación de las autoridades y está a la espera de alguna fuente de financiación. De necesidades y posibilidades saben mucho los jóvenes. En su gran mayoría los miembros de este colectivo buscan independizarse sin hipotecar sus vidas debido a la precariedad laboral y a la falta de recursos.
"La sociedad les hace perder los estribos, porque en el momento en el que tratan de encontrar su lugar y empiezan a trabajar no pueden permitirse el lujo de pagar por un albergue ni ningún otro tipo de alojamiento", asegura Timothy Pain, exdirector ejecutivo de la Asociación Cristiana.
A priori, la idea de vivir en un contenedor puede sonar disparatada, pero si se tiene en cuenta que el Gobierno británico planea edificar tres millones de nuevas viviendas para el 2020 sin ninguna medida concreta para los jóvenes ni las personas con pocos recursos, lo que parece un disparate se convierte en una posibilidad muy real a tener en cuenta. Y es que cuando alguien desea tener su propio hogar también quiere sobrevivir y llegar a fin de mes, y no terminar en la calle desahuciado por culpa de una hipoteca o un alquiler que es incapaz de pagar.
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