Sociedad
Un estadounidense muere de rabia por trasplante de un riñón infectado
Un ciudadano estadounidense del estado de Maryland falleció tras recibir hace más de un año y medio un riñón infectado en un trasplante, según informaron las autoridades de salud.
El hombre murió el pasado 27 de febrero en un hospital de veteranos de guerra en Washington. Los médicos detectaron que la causa de su muerte fue la rabia.
El donante del riñón, un joven de 20 años, falleció en Florida en 2011. Según informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), los doctores sabían que padecía encefalitis, pero no le realizaron ninguna prueba de rabia antes de que sus órganos fueran trasplantados, ya que no sospechaban que la causa de su muerte fuera la rabia de mapache, la misma enfermedad que luego mató al hombre de Maryland.
"El trasplante de órganos fue realizado más de un año antes de que los síntomas se desarrollaran en el receptor y que éste muriera de rabia", declaró el CDC, añadiendo que "este período es mucho más largo que el típico período de incubación de la enfermedad”.
El joven donó a otros tres pacientes su corazón, hígado y otro riñón. Los médicos contactaron inmediatamente con estos receptores, y actualmente están recibiendo un tratamiento antirrábico, aunque de momento no muestran síntomas de esta enfermedad.
A pesar de este caso –indicó el CDC- los beneficios de los trasplantes de órganos "por lo general son mayores que los riesgos".
El donante del riñón, un joven de 20 años, falleció en Florida en 2011. Según informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), los doctores sabían que padecía encefalitis, pero no le realizaron ninguna prueba de rabia antes de que sus órganos fueran trasplantados, ya que no sospechaban que la causa de su muerte fuera la rabia de mapache, la misma enfermedad que luego mató al hombre de Maryland.
"El trasplante de órganos fue realizado más de un año antes de que los síntomas se desarrollaran en el receptor y que éste muriera de rabia", declaró el CDC, añadiendo que "este período es mucho más largo que el típico período de incubación de la enfermedad”.
El joven donó a otros tres pacientes su corazón, hígado y otro riñón. Los médicos contactaron inmediatamente con estos receptores, y actualmente están recibiendo un tratamiento antirrábico, aunque de momento no muestran síntomas de esta enfermedad.
A pesar de este caso –indicó el CDC- los beneficios de los trasplantes de órganos "por lo general son mayores que los riesgos".
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