"Esclerosis de la superpotencia": Las terribles profecías de Nostradamus para el 2017
El boticario, profeta, médico y astrólogo francés Michel de Nôtre-Dame, más conocido como Nostradamus, hizo en el siglo XVI una serie de vaticinios sobre el futuro del mundo. El portal británico Express ha recopilado algunas de las "terribles" interpretaciones realizadas por los seguidores de Nostradamus, que según ellos podrían hacerse realidad durante el 2017.
En el escenario global, China podría realizar unos "movimientos audaces", con el fin de "curar el desequilibrio económico" mundial. Según Nostradamus, las medidas adoptadas por Pekín tendrían unos efectos muy duraderos.
Mientras tanto, Italia, debido al creciente desempleo y a su desequilibrio bancario, correría el riesgo de convertirse en el "epicentro" de una nueva crisis financiera de la eurozona.
El francés también pronosticó que el próximo año la actual superpotencia, en referencia a EE.UU., entraría en una etapa en la que el país sería "más ingobernable e incompetente". Habló de una "esclerosis de superpotencia" provocada, entre otras cosas, por la corrupción política y las crecientes desigualdades de la sociedad estadounidense.
Rusia, por su parte, llegaría a un acuerdo con Ucrania para poner fin a la crisis ucraniana. Sin embargo, ese acuerdo sería rechazado por Washington, pero contaría con la aprobación de Alemania y los demás miembros de la Unión Europea.
En cuanto a América Latina, Nostradamus vaticina un año de redefinición para los países de esta región, donde sus gobiernos se alejarían de las políticas de izquierda, preparando así el terreno para la aparición de posibles disturbios civiles.
Las profecías más aterradoras del año hablan de unos posibles conflictos armados, que podrían desatarse debido al calentamiento global y la disminución de los recursos naturales. A pesar de ello, el terrorismo seguiría siendo la mayor amenaza para el mundo.
En términos tecnológicos, Nostradamus predijo que en el 2017 se generalizaría el uso de la energía solar, lo que a su vez tendría impactos positivos tanto en la economía como en la lucha contra el cambio climático. Además, vaticinó un 'boom' de los viajes espaciales comerciales, con vuelos orbitales alrededor de la Tierra.