¿Accidente o sabotaje? El FBI desclasifica las posibles causas del siniestro del Hindenburg (FOTOS)
La investigación de las causas del siniestro del dirigible alemán Hindenburg, símbolo del poder nazi, el 6 mayo de 1937 ha generado muchas teorías. Según la más común, la fuga del gas de hidrógeno que provocó que el zepelín se incendiara durante el aterrizaje fue provocada por la electricidad estática del aire. Sin embargo, unas décadas después continúan circulando otras versiones que apuntan a un acto de sabotaje.
See ground footage of the Hindenburg disaster, 80 years after the fatal flight. https://t.co/VQFKgPYlMKpic.twitter.com/xzCy7HEHus
— Getty Images (@GettyImages) May 6, 2017
"Nunca sabremos con seguridad qué sucedió. Con suerte, no fue un sabotaje", señaló el sábado 6 de mayo el doctor Horst Schirmer, familiar de uno de los ingenieros del Hindenburg, en una ceremonia memorial en la base aérea de EE.UU. en Lakehurst Maxfield (Nueva Jersey), informa Asbury Park Press. Sin embargo, unos documentos desclasificados del FBI muestran que la agencia no descartó el sabotaje tras la catástrofe.
Wreath laying, Hindenburg memorial service. pic.twitter.com/de6Ht8Saa4
— Airships.net (@Airships) May 7, 2017
Comunistas clandestinos
Según una versión, la aeronave podría haber sido saboteada por un grupo secreto de comunistas y antifascistas. En una carta desclasificada, el agente del FBI G.N. Lowdon citó varios artículos publicados en el periódico del Partido Comunista estadounidense, 'Daily Worker', e indicó que existía la posibilidad de actos de sabotaje contra los sistemas de transporte de la Alemania nazi. Sin embargo, Lowdon no encontró ninguna evidencia de la existencia de grupos clandestinos.
The Zeppelin LZ 129 Hindenburg catching fire on May 6, 1937 at Lakehurst Naval Air Station in New Jersey. pic.twitter.com/wHsrXJHWNk
— History (@HistoryTime_) May 6, 2017
¿Un acróbata?
El comandante de la estación aeronaval deLakehurst, Charles E. Rosendahl, señaló a los investigadores del FBI que el sabotaje sería una "causa lógica" y propuso que las llamas fueron iniciadas por una persona. Rosendahl citó a Hugo Eckner, empleado de Luftschiffbau Zeppelin, según el cual la norma que prohibía a los pasajeros salir de sus compartimentos sin un miembro de la tripulación "no se aplicaba estrictamente".
Rosendahl mencionó sus sospechas respecto a uno de los pasajeros en particular, Joseph Spah, a quien se permitió cuidar a sus perros, que estaban en el cuarto de carga, debajo de los tanques de gas. Spah era acróbata y pudo, según Rosendahl, usar sus habilidades para alcanzar el área de combustible. Pero para esa teoría tampoco tiene pruebas.
Conspiración mediática
Una versión más extraña señala que periodistas organizaron la catástrofe con fines de lucro. Harold E. Hartney, coronel de la Fuerza Aérea norteamericana, pasó al FBI una carta cuyo autor anónimo, a pesar de admitir que no tenía "pruebas directas para sus conclusiones", destacó que "las fotos del accidente se tomaron desde todos los ángulos" y afirmó que un "grupo de estafadores podría haber organizado un accidente de ese tipo… por dinero".
Una bala
Otra versión popular, que supone que el dirigible fue siniestrado por disparos, motivó al senador por Nueva York, Royal Copeland, a dirigir una carta al FBI el 8 de mayo de 1937. El político también preguntó sobre las especulaciones respecto a unas misteriosas huellas encontradas en un campo cerca del lugar de los hechos. Los documentos desclasificados muestran que esas huellas las dejaron unos niños un día después de la catástrofe.
Today in 1937: The Hindenburg crashes. Photographer Murray Becker captures it shot for shot: https://t.co/0P31RUwR1ypic.twitter.com/Xx3i1T9KHa
— amhistorymuseum (@amhistorymuseum) May 6, 2017