VIDEO: Atropelló a un profesor por no darle entrada al estacionamiento del colegio
Los accidentes vehiculares ocurren. Pero el sujeto que atropelló a un profesor del colegio Winston Churchill, en Reino Unido, no fue víctima ni del azar de las circunstancias ni de su impericia al volante, sino que a conciencia se llevó por delante al docente cuando este le impidió entrar al estacionamiento para empleados de esa institución educativa. El iracundo impulso le valió ahora una sentencia a 10 meses de prisión y el pago de una indemnización de 140 libras esterlinas (unos 190 dólares).
Los hechos ocurrieron el pasado 20 de febrero y la audiencia judicial tuvo lugar el 22 de septiembre.
Rainier Schoeman, de 22 años de edad, perdió los estribos cuando el profesor Gareth McCarthy le negó el acceso al referido estacionamiento, en momentos en que se apresuraba a recoger a la hija de su pareja, de 9 años de edad.
En imágenes captadas por circuito cerrado de televisión se aprecia la llegada del joven y el breve intercambio de palabras entre ambos. Luego McCarthy le da la espalda y, cansado de esperar a que Schoeman cumpliera sus indicaciones, se recuesta sobre el capó del auto. Entonces el chofer acelera de repente, lo avienta sobre el auto y lo deja caer al piso unos metros después, reportó el diario británico 'The Daily Mail'.
En el video se observa cómo dos estudiantes del colegio pasan muy cerca del enloquecido conductor y casi resultan también atropellados.
A McCarthy se le había dado la orden de custodiar la entrada del estacionamiento e impedir el paso a los vehículos. Previamente, la dirección del colegio había enviado una carta a los padres para informarles de la medida, adoptada para evitarle riesgos a los niños a su salida de la escuela.
Durante una audiencia celebrada el pasado 22 de septiembre, Schoeman se declaró culpable por haber agredido al profesor, conducir peligrosamente su auto, no contar con seguro y no haber cumplido una prueba de manejo. El abogado defensor del agresor lo describió como "inmaduro" y admitió que solía comportarse de forma indignante.