Las agencias de seguridad privada de Latinoamérica están armados hasta los dientes
Los empleados de las empresas de seguridad privada en América Latina son los más armados del mundo, según el 'Informe de Armas Ligeras 2011' publicado por el Instituto de Estudios Internacionales y Desarrollo de Suiza.
Según el documento, los agentes de seguridad privados en Latinoamérica están armados hasta los dientes y son los más blindados del mundo, con excepción de los lugares en guerra.
El informe recoge que la tasa de posesión de armas supera casi diez veces a la de sus homólogos europeos. Actualmente el campo de la seguridad privada en América Latina está integrado como mínimo por 20 millones de personas. El informe explica que en la región hay una tendencia de sustituir a la policía en la protección de bancos, barrios e individuos.
El analista en temas de seguridad Sandro Villanes comentó a RT que la escasez de policías hace que su terreno sea consumido por este sector emergente. "En ciertos casos estas empresas de seguridad no son alternativas de combatir, sino una alternativa de prevenir y coordinar con las entidades públicas, llámese las policías de cada país. Me parece que hay un trabajo de cierta coordinación entre las empresas de seguridad que definitivamente por leyes legales de cada país no pueden hacer el trabajo de capturar a una persona. Simplemente ellos previenen, detectan, informan, ayudan a la policía", subrayó Villanes.
Esta situación refleja la gran expansión de la seguridad privada en varios países de América Latina en las últimas dos décadas. Así, en Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Costa Rica, El Salvador, Argentina, Colombia, Chile y República Dominicana hay más agentes de seguridad privada que policías. Por ejemplo, Guatemala es el ejemplo puntero, ya que cuenta con 120.000 agentes privados frente a 19.900 policías, es decir, por cada 6 agentes privados hay un policía, la mayor desproporción de los 70 países analizados en el informe.
Le sigue Honduras, donde hay 60.000 agentes privados y 12.300 policías (una proporción de 4,88 a 1); Nicaragua, con 19.700 agentes privados y 9.200 policías (2,14 a 1); Panamá, con 30.000 agentes privados y 12.250 policías (1,97 a 1); Costa Rica, con 19.550 agentes privados y 12.100 policías (1,61 a 1); y el Salvador, con 21.140 agentes privados y 16.730 policías (1,26 a 1).
Según el informe, México tiene una relación de casi 'uno a uno': el país tiene 450.000 efectivos en empresas de seguridad particular, frente a 495.821 policías del Estado, al igual que Brasil con 570.000 agentes privados y 687.468 agentes públicos. Sin embargo, en Argentina se estima que puede haber 50.000 agentes privados más de los registrados, en Brasil la cifra oscila entre los 670.000 y el millón y en México entre los 240.000 y los 600.000.
Los datos revelados en el informe indican que Centroamérica es un terreno especialmente abonado para las empresas privadas de seguridad, ya que en todos los países el número de agentes privados supera con amplitud al de miembros de las fuerzas públicas.