La CIA considera a Israel la principal amenaza de su contrainteligencia
En declaraciones a la agencia Associated Press bajo la condición de mantener su total anonimato, actuales y anteriores funcionarios estadounidenses de inteligencia,
culparon a Israel de espiar a sus agencias en Tel Aviv, basándose en una supuesta filtración de datos del Mossad.
EE.UU. sospecha que el Mossad y el Shin Bet –equivalente israelí del FBI- han intentado robar los secretos de su contrainteligencia. Esto sugiere que sus datos clasificados están más a salvo de otros Gobiernos de Oriente Medio que de Israel.
La fuente afirma que esos sucesos muestran que, a pesar de la hermandad existente entre los dos países, el servicio de seguridad de Estados Unidos considera a Tel Aviv “un socio perjudicial y la amenaza número uno de contrainteligencia en la División de Oriente Medio de la CIA”.
Estas declaraciones salen a la luz tan solo un día después de que el jefe del Estado Mayor de Irán, Hassan Firouzabadi, anunciara que varios servicios secretos occidentales, incluyendo a la CIA, se encuentran bajo la influencia del Mossad.
Sin embargo, la desconfianza entre los dos aliados no nació ayer y dura ya varias décadas. Así, en 1987, Jonathan Pollard, un analista civil de inteligencia de Marina de EE.UU., fue declarado culpable de espiar para Israel y condenado a cadena perpetua. En 2006, un analista del Departamento de Defensa fue sentenciado a 12 años de prisión por entregar información clasificada a un diplomático israelí y dos 'lobistas' pro Israel.
"Es una relación complicada", dijo Joseph Wippl, ex oficial de la CIA. "Ellos tienen sus intereses. Nosotros tenemos los nuestros. Para EE.UU., es un acto de equilibrio".
La relación entre EE.UU. e Israel se conoce en el argot de espionaje como 'Amigos a Amigos', que proviene de la frase, "Los amigos no espían a sus amigos". Pero ese pacto se ha violado en repetidas ocasiones y funcionarios de la CIA siguen desconfiando de Israel, a medida que aparecen nuevos casos de espionaje.