Alemania: Dos hospitales católicos se niegan a atender a una víctima de violación

Según cuenta Irmgard Maiworm, de 25 años de edad, se despertó en un banco en un parque tras salir con sus amigos por la noche y se dio cuenta de que había sido drogada y violada. En seguida se dirigió a un hospital católico. La mujer se quejó de dolores y dificultades al orinar y llevaba la ropa sucia.
No obstante, los doctores del hospital se negaron a atender a la joven justificando su decisión diciendo que, según la ley, en caso de violación el médico está obligado a aconsejar a la víctima que tome la píldora anticonceptiva de emergencia, lo que va en contra de su creencia. Lo mismo pasó en otro hospital católico.
El caso se produjo el mes pasado pero no ha sido publicado por los medios alemanes hasta ahora. El incidente recibió una fuerte reacción de la Iglesia católica, que descartó que se distanciara de las víctimas de violación. "Lamentamos mucho la impresión que se ha dado a la opinión pública de que las víctimas de violación ya no pueden ser tratadas en los hospitales católicos. Eso es falso", reza la declaración de la archidiócesis de Colonia.
Según la declaración eclesiástica, las víctimas de violación tienen todo el derecho a recibir el tratamiento necesario en los hospitales, incluyendo la obtención de pruebas forenses.